El río Nervión atraviesa varios municipios alaveses y vizcainos, pero ¿alguna vez se han acercado a ver el lugar en el que esta fuente de agua tan esencial nace? Pues precisamente en esta ocasión les proponemos hacer un pequeño viaje para acercarnos a un lugar maravilloso que tiene como una de sus virtudes la capacidad de dejarnos con la boca abierta, robarnos el aliento y maravillarnos, todo en uno. Conocido como nacedero del río Nervión o Salto del Nervión, situado entre las provincias de Burgos, Araba y Bizkaia, no podemos perdernos esta aventura si nos acercamos a Sierra Salvada.
Para llegar a este gran espacio podemos empezar nuestra aventura desde Bilbao (hora y cuarto en coche), Vitoria (algo más de una hora), Donostia (dos horas) o Pamplona (cerca de dos horas). No importa de dónde arranquemos. El viaje merece la pena. Y es que cuando nos acerquemos a este entorno tan espectacular podremos disfrutar del espectáculo que produce el agua cayendo a una altura de más de doscientos metros, pues es la más alta de toda la península.
Precisamente por eso son muchas las personas que se acercan cada año desde distintos puntos del Estado para disfrutar de esta obra de la naturaleza que ya se ha convertido en todo un reclamo turístico. Si tenemos suerte y no hay mucha niebla en el ambiente nos quedaremos con la boca abierta al contemplar las vistas, aunque no es muy apta para personas que tengan miedo a las alturas, pues los ya mencionados más de doscientos metros de altura no son baladí.
Para llegar a este espacio tan mágico además tenemos la posibilidad de acceder desde distintos puntos. Tal y como recuerdan desde el Ayuntamiento de Amurrio, municipio al que precisamente pertenece este gran reclamo, podemos llegar andando, en bici o incluso con sillita al mirador. Para ello, podemos dejar nuestro vehículo en cualquiera de los tres parkings que tenemos a nuestra disposición (uno en la entrada del Monte Santiago, otro entre el parking de la entrada y la Fuente Santiago, y el tercero conocido como Aparcamiento Fuente Santiago). “El parking más demandado suele ser el número 3, el aparcamiento Fuente Santiago porque desde ahí comienzan y terminan la mayoría de las rutas que se pueden hacer en los alrededores”, explican desde el consistorio.
Sea como sea, esta ruta perfecta para grupos de amigos, familias y parejas es la opción ideal si el tiempo nos acompaña para compartir una agradable aventura al aire libre, rodeados de naturaleza y con un espectacular paisaje que se quedará grabado en nuestra memoria para siempre. Otra opción, nos recuerdan, es ver el Salto desde Delika, que nos ofrece una perspectiva totalmente distinta, ya que seguimos el curso del río hasta llegar “donde el gran Salto del Nervión se rompe en mil pedazos”.
Gujuli, otra gran atracción
Si hablamos de cascadas, no podemos olvidarnos de una que se encuentra bastante próxima, aunque es algo más desconocida que el Salto del Nervión. A algo menos de una hora en coche de este gran reclamo turístico encontramos la cascada de Gujuli, tan hermosa como desconocida para algunos. Pero, ¿dónde se encuentra Gujuli?
Daremos con esta cascada, del mismo nombre que la localidad que la alberga, en el límite del Parque Natural del Gorbea, donde podemos aprovechar también para hacer alguna ruta, o coronar la cumbre del Monte Gorbea. Si nos acercamos a Gujuli encontraremos un parking disponible para nosotros, un merendero donde aprovechar para avituallarnos y un mirador desde donde maravillarnos con las vistas que nos ofrece la cascada.
Al fin y al cabo, allí podemos disfrutar -cuando la lluvia o la nieve ha hecho acto de presencia en la zona la caída del agua suele ser mucho más impresionante- del espectáculo natural que supone el río Jaundia precipitándose al vacío desde más de cien metros.
La cascada de Gujuli.
Planes alternativos
Ya que nos encontramos por la zona, hay varias cosas que podemos hacer para aprovechar la ocasión. Ejemplo de ello es visitar la villa de Orduña. Allí podemos acercarnos a la ermita de la Virgen de Orduña, el Santuario de Nuestra Señora de la Antigua o su museo. También podemos acercarnos a su balneario.
Otra opción es recorrer el valle de Ayala con todos sus pueblos grandes y pequeños, como Artziniega, Ayala, Amurrio o Laudio. Si lo nuestro es el buen comer y el buen beber, podemos echar un vistazo a Txakoli Astobiza (en Okondo) o a Txakoli Beldui (en Laudio), así como acercarnos a alguno de los muchos restaurantes que encontraremos por la zona, con especial atención por sus vistas al Kumeak Santa Lucia, restaurante que encontraremos en el monte del mismo nombre, justo al lado del santuario de Santa María del Yermo.
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