Sánchez anuncia más de 230 millones de euros para combatir la inseguridad alimentaria

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este martes que se van a movilizar más de 230 millones de euros para hacer frente a los problemas de inseguridad alimentaria actuales, al tiempo que ha llamado a apostar por las soluciones multilaterales, a una mejor coordinación y a un comercio abierto y transparente.

Así lo ha desvelado durante la Cumbre Mundial sobre Seguridad Alimentaria, una iniciativa personal suya y que ha estado copatrocinada por Estados Unidos, la Unión Europea y la Unión Africana y que se ha celebrado en los márgenes de la Asamblea General de la ONU.

Sánchez ha recalcado que la seguridad alimentaria es "una prioridad" para el Gobierno, "pero aún queda mucho por hacer". Por eso, para "redoblar esfuerzos", España va a donar 151,5 millones de euros y a movilizar otros 85 millones en créditos durante los próximos tres años, lo asciende a un total de 236,5 millones.

Con este dinero, ha explicado el presidente, "España contribuirá al trabajo de organizaciones especializadas así como a los programas" de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Desde Moncloa han explicado que los créditos se canalizarán a través del Fondo para la Promoción del Desarrollo (FONPRODE) de la AECID.

"Se nos acaba el tiempo", ha advertido a los presentes, entre los que estaba el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el de Senegal y presidente de turno de la Unión Africana, Macky Sall, y el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, todos ellos copatrocinadores de la cumbre.

"Si los agricultores no obtienen los fertilizantes en el momento adecuado, las malas cosechas, o incluso la pérdida de las mismas, seguirán empeorando la situación", ha advertido el presidente del Gobierno.

En este sentido, ha defendido que "la única forma" de superar esta crisis que tiene múltiples causas es "a través de un enfoque multilateral", si bien ha defendido que además "Rusia debe cesar su guerra ilegal" en Ucrania.

AYUDAR A LOS MÁS VULNERABLES

Pero, mientras luchamos por la paz, ha sostenido, hay que dar pasos para proteger a los más vulnerables. Esto pasa, ha dicho Sánchez, en primer lugar por apostar por soluciones multilaterales y por una mayor coordinación para ser más eficientes y evitar duplicar esfuerzos con distintas iniciativas, que deberían "alinearse y complementarse".

Asimismo, el presidente del Gobierno ha apostado por "un entorno comercial abierto y transparente" y por eliminar los obstáculos al comercio de productos agrícolas, incluidos los fertilizantes, ya que con las restricciones a la importación y exportación de este tipo de insumos se está exacerbando el problema de la inseguridad alimentaria.

"Mientras haya hambre no habrá paz y sin paz seguirá habiendo hambre", ha rematado Sánchez su intervención ante una sala en la que también estaban entre otros el canciller alemán, Olaf Scholz, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, o el primer ministro canadiense, Justin Trudeau.

ACTUAR UNIDOS

Todos los que han tomado la palabra durante el acto inaugural han coincidido en la necesidad de actuar de forma unida y coordinada frente a lo que Michel ha tachado como "el desafío global más importante" de la actualidad. El presidente del Consejo Europeo ha defendido que no es "aceptable" que millones de personas pasen hambre y que muchas de ellas estén incluso al borde de la hambruna.

El responsable europeo ha hecho especial hincapié en el problema de la falta de fertilizantes, defendiendo que debe ser prioritario abordarlo, sobre todo en el caso de África, y tratar de promover su producción en este continente.

Precisamente, el presidente senegalés se ha referido a este problema y también ha comparado la situación actual con la posterior a la Segunda Guerra Mundial, subrayando que el 14 de febrero de 1946 la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución sobre "la penuria mundial de cereales y de otros productos". "Parece que la historia se repite", ha comentado.

Sall ha incidido en que aunque esta crisis afecta a todos los países, son los más vulnerables los que más sufren. Por ello, ha apostado por "soluciones concertadas" y también por "garantizar la apertura y la transparencia de los mercados de cereales y fertilizantes".

A su vez, el secretario de Estado norteamericano ha reconocido que ningún país por sí solo podrá resolver este problema y ha adelantado que el presidente estadounidense, Joe Biden, hará nuevos anuncios de contribuciones mañana en su intervención ante la Asamblea General de la ONU. "Más allá de lo que digamos, lo que importa es lo que hacemos", ha resumido.

También ha tomado la palabra el canciller alemán, quien ha advertido de que "los próximos años pueden ser aún más difíciles por la subida de los precios de los fertilizantes y de la energía", al tiempo que ha asegurado que Alemania está decidida a seguir combatiendo la inseguridad alimentaria.

El presidente colombiano ha aprovechado para poner en tela de juicio el concepto de seguridad alimentaria, subrayando que no se tiene en cuenta la "desigualdad de ingresos" que es la que la propicia. Asimismo, ha defendido la importancia de la soberanía alimentaria y que esta pueda llegar a ser un derecho y se incluya en los tratados comerciales.