Es difícil encontrar ya en un hogar guipuzcoano a una familia reunida entorno a una mesa, cualquier día de la semana, compartiendo la comida de una jornada corriente. Las prisas, los horarios del trabajo y del colegio... en definitiva, el día a día nos impide ver imágenes que hace unos años eran habituales.
Así los han constatado en Askora que han preguntado a familias y centros escolares para conocer los hábitos de consumo y alimentación de los hogares guipuzcoanos. Los resultados detallados de este estudio, que han denominado 'Elikation', se pueden consultar en la web del proyecto, elikation.eus, pero en Onda Vasca Iratxe Casado, responsable de Innovación y ODS de Askora, y Naiara Esteban, directora de Calidad y Medio Ambiente de Askora, nos han dado cuenta de las conclusiones principales.
'Elikation' es un estudio sobre alimentación sostenible y saludable que nace de una simple observación y una reflexión. Según nos ha explicado Iratxe Casado, "hemos observado que hay mucho cambio en torno a la alimentación de los jóvenes. Se trata de un nuevo contexto y queríamos estudiar qué oportunidad hay de mejorar". Subraya que "la alimentación que siguen nuestros jóvenes ya no es la alimentación que seguíamos nosotros. Tampoco la sociedad y el mundo entienden la alimentación como se entendía antes. Ahora metemos criterios de modelo de consumo, el tema del despilfarro, es una nueva mirada al mundo de la alimentación".
Encuesta
Naiara Esteban explica que el proyecto 'Elikation' "tiene varias patas". Detalla que, "por una parte, lo que hemos querido hacer es una encuesta generalizada a todas las familias de Euskadi, en la cual hemos preguntado desde los hábitos de consumo que tienen hasta cómo se organizan en casa a la hora de preparar las distintas comidas, quiénes participan, cómo participan... Hemos visto también tipos de alimentos que consumen, cuáles son los objetivos" que buscan con su modelo de alimentación, etc... Ademas, a los centros escolares les enviaron otro tipo de encuesta "para saber cuál es la inquietud que tienen ellos acerca de la alimentación dentro del ecosistema escolar".
Las encuestas de este proyecto se completaron con una curiosa actividad: un 'Elikasafari' que "ha consistido en reunir a 10 familias a las cuales les hemos dado 4 retos a realizar, que los han ido grabando por medio de video y por medio de conversaciones de audio". Así, "según ellos iban haciendo los retos, nosotros íbamos recopilando un montón de información" sobre "los hábitos de consumo que tienen, la organización a nivel de hogar en cuanto a cómo se alimentan, cómo se organizan para hacer la compra, cómo cocinan... todo eso", aclara Naiara Esteban.
Con los datos recopilados, Askora ha identificado 25 áreas de actuación.
Más implicación de los txikis y adolescentes
Asegura Iratxe Casado que "hemos descubierto que el papel que tienen los niños, niñas y jóvenes en su alimentación es bastante bajo, el nivel de participación a la hora de las rutinas de la alimentación es casi inexistente. Principalmente, la alimentación en los hogares está en manos de una única persona que se encarga de hacer la compra, organizar los menús, cocinar... toda esa parte hace que el contacto que tienen los jóvenes con la alimentación en sus casas sea bastante bajo".
Además, añaden otro factor y es la tendencia a unir la alimentación del fin de semana con el ocio: "de disfrute, en casa o fuera de casa".
Por ello, creen que "es importante y necesario que asuman un rol más activo en su alimentación". Recuerdan que en generaciones anteriores la referencia en alimentación estaban "en casa, en la familia", sin embargo hoy en día, esa referencia se bifurca "entre las familias y los comedores escolares". "Había como una conciencia familiar de la alimentación" que ha cambiado con "la velocidad de la vida". Por ello, consideran que es necesario "a que con los jóvenes generemos oportunidades de conectar con un modelo de alimentación más sano, más sostenible del que tanto se habla ahora y es tan necesario".
Menos tiempo no implica alimentación menos saludable
Iratxe Casado y Naiara Esteban nos cuentan que además han detectado que "todas las curvas de estrés que hay en el día a día de una familia, casualmente, muchas se encuentran en el momento del desayuno y en el momento de la cena, con lo cual, muchas veces se hace una alimentación correcta pero en un contexto de prisa. Y eso también afecta".
Es ahí donde creen que debemos aprovechar las herramientas que nos ofrece la cocina de hoy en día. "A día de hoy existen diferentes tecnologías que nos ayudan en esto porque es una realidad que muchas veces los adultos de la casa son los que estamos trabajando. Ahora la tendencia es a utilizar la olla express, a utilizar diferentes tipos de robots de cocina y, en este sentido, no lo vemos mal, porque al final pueden ser una gran ayuda -tenemos poco tiempo o el tiempo que empleamos en la cocina es menor porque tenemos que hacer mil cosas al cabo del día- pero lo que sí nos gusta remarcar es que mientras este tipo de tecnologías las sepamos emplear adecuadamente y podamos elaborar platos rápidos y saludables... todo eso bienvenido sea. Es ahí donde queremos incidir un poco más: que se puede hacer con menos tiempo y que podemos tener una alimentación adecuada".