Vida y estilo

Sigue la maldición de 'Sálvame': el nuevo herido es Pipi Estrada

Pipi Estrada, tras golpearse con la mesa.

Sálvame no gana para sustos. Más allá de sus malas audiencias, en poco más de un mes han sucedido cuatro accidentes entre sus colaboradores. Ya se habla de la maldición de Sálvame o de un mal de ojo de Paz Padilla como venganza por su despido, pero la realidad es la que es.

Todo comenzó el 25 de abril, cuando Belén Esteban se rompió la tibia y el peroné al hacerle emular en el programa de Jorge Javier Vázquez una prueba de Supervivientes y colgarse de una barra. Las consecuencias ya se conocen: una complicada operación y una larga y dura rehabilitación que la madrileña acaba de empezar.

Cuatro días después llegó el turno de Lydia Lozano. Fue en su casa, pero la veterana colaboradora se fracturó el radio al caer el suelo mientras se ponía una bota. Eso sí, con un brazo escayolado la llorona oficial del programa ha podido seguir acudiendo al plató sin mayor problema.

Un mes exacto después del accidente de Belén Esteban, Chelo García Cortés también se rompió el radio en directo. Estaba desfilando en la Sálvame Fashion Week cuando resbaló y terminó con una fractura, de la que ha sido operada en la tarde de este miércoles y que le obligará a tener el brazo inmovilizado durante un mes.

El último en caer, literalmente, ha sido Pipi Estrada, aunque no ha revestido gravedad. El recuperado colaborador de Sálvame, que no para quieto, ha decidido este miércoles hacer la croqueta en el plató y deslizarse por el suelo, con tan mala suerte que se ha dado con la cara en la mesa y se ha abierto una brecha, junto al ojo, de la que ha brotado la sangre. El ex de Terelu Campos no le ha dado ninguna importancia y ha bromeado al respecto, pero la maldición sigue ahí.

02/06/2022