¿Sabes qué requisitos y qué permisos necesitas para volar un dron en Donostia?

Con la llegada del buen tiempo, proliferan los vuelos de drones sobre Donostia que tratan de captar imágenes de la capital guipuzcoana y, sobre todo, de sus rincones más fotogénicos: las playas de La Concha, Ondarreta y Zurriola, Ulía, Urgull, etc... Imágenes aéreas de postal que después se comparten en redes sociales. Pero, ¿conocemos qué requisitos son necesarios y qué permisos hay que pedir para volar un dron sobre Donostia? Seguramente, la respuesta sorprenda a muchos.

En este sentido, el Ayuntamiento de Donostia ha querido aclarar las dudas a este respecto ya que la Guardia Municipal ha recibido, en los últimos meses, numerosos avisos de avistamientos de drones que volaban sobre diferentes puntos de la ciudad y que no habían sido comunicados. El concejal de Seguridad, Bomberos y Protección Civil de Donostia, Martín Ibabe, ha desvelado que se han llegado a producir hasta 20 avistamientos de vuelos de drones no comunicados en un mes, lo cual nos preocupa, ya que son vuelos que se están registrando sin ningún tipo de control ni permiso". De hecho, no todos los vuelos avistados son después detectados por los agentes: en 2023 la Guardia Municipal interceptó solo 10 actividades no comunicadas.

A esto hay que añadir las 46 peticiones de vuelo que sí gestionó correctamente el Ayuntamiento de Donostia, lo que supone unos 4 al mes aproximadamente. Estas cifras nos dan una idea de cuántos drones sobrevuelan Donostia al año y de que su uso se está extendiendo cada vez más. 

Requisitos y permisos

Lo primero que hay que saber a la hora de querer volar un dron sobre Donostia es que, con independencia del uso que se le vaya a dar -profesional o recreativa- o del tamaño del aparato, siempre hay que solicitar una autorización al Ayuntamiento de Donostia, a través de la Unidad del Espacio Público. Y aquí hay malas noticias ya que posiblemente, los drones para uso recreativo no obtengan el permiso necesario. Según ha explicado el concejal de Seguridad esto se debe a que Donostia tiene una particularidad "y es que se encuentra en una zona de influencia aeroportuaria" por su cercanía al Aeropuerto de San Sebastián, situado en Hondarribia.

Además, antes de solicitar esa autorización, hay que tener en cuenta que desde el 31 de diciembre de 2020 existen unos requisitos mínimos que están regulados por normativa europea. Así, Ibabe ha recordado que "es indispensable que las personas que pretendan volar un dron estén registradas como operadoras en la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), que tengan un mínimo de formación de piloto de este tipo de aparatos acreditable, un seguro obligatorio de responsabilidad civil, seguir las reglas generales de operación establecidas, así como tener en cuenta las limitaciones al vuelo decretadas en determinados lugares y disponer de un sistema de identificación a distancia directa".

Una vez cumplimentados estos requisitos mínimos, Martin Ibabe, ha explicado que "es indispensable hacer un documento de coordinación con ENAIRE, el gestor de navegación aérea de España, posteriormente comunicar el vuelo a la Consejería de Seguridad del Gobierno Vasco, y finalmente obtener un permiso municipal, a través de la Unidad de Uso del Espacio Público, que comunica la actividad a la Guardia Municipal, para que pueda realizar un control de desarrollo de la misma".

También los drones pequeños

Estos requisitos y permisos afectan a todo tipo de drones, también los de menos de 250gr, que además no pueden superar los 120 metros de altura desde el suelo, ni los 50 metros de distancia horizontal. Tampoco se podrá volarlos en un radio de 8 kilómetros de cualquier aeropuerto o espacio aéreo controlado, ni en Parques Nacionales, zonas de conservación de fauna, Reservas de la Biosfera o espacios naturales protegidos, ni sobre una aglomeración de personas".

Otro dato a tener en cuenta es que si los drones cuentan con cámara, quien pilote el aparato deberá respetar la Ley de Protección de Datos y el Derecho al Honor y la Intimidad de las personas.

Multas

Quienes no respeten estos requisitos y normativas, se enfrentan a multas que pueden oscilar desde los 60 euros hasta los 225.00 euros en el caso de que el uso del dron sea recreativo. Si su uso es profesional, las sanciones van desde los 4.500 euros "hasta cifras mucho más elevadas de los 225.000 euros citados" ha subrayado Ibabe.

El concejal ha explicado que las multas no "las pone la propia Guardia Municipal sino que lo que hace es remitir los expedientes a AESA que es la encargada de decidir qué tipo de sanción, en función de la gravedad del vuelo, va a poner en cada caso"

"El objetivo de todo esto", ha señalado Martín Ibabe, "es poner coto a una actividad que vemos que está proliferando, que tiene sus riesgos. Y en este sentido, sería de agradecer que no tuviéramos que encontrarnos con situaciones, como en el 2023, de tener que andar interceptando vuelos que no han sido debidamente comunicados. Estamos vigilantes en relación a este asunto y desde la Guardia Municipal y el Departamento de Espacio Público le estamos haciendo un estrecho seguimiento".