Comienzan las labores de ampliación del vertedero de Esparza, en Galar

Hace más de cinco años que el vertedero de Esparza, en la Cendea de Galar, superó el alcance máximo de residuos permitido por el Plan de Incidencia Supramunicipal (PSIS) que lo regula: contaba con 700.000 m³ por encima de lo permitido ya en 2020 y superó el millón un año después. La cota ha seguido subiendo desde entonces aunque parece que –por fin– la entidad responsable de su gestión ha comenzado a realizar movimientos de tierra para trabajar en la parcela aledaña, que servirá de ampliación, lo que le permitiría dejar de verter en una zona en la que se ha venido rebasando la legalidad durante demasiado tiempo.

Tanto el Ayuntamiento de Galar como el Concejo de Esparza denunciaron la situación en reiteradas ocasiones –el Consistorio aprobó en pleno un acuerdo para buscar soluciones ya en 2018– y mostraron su preocupación al ver cómo los camiones que llegaban al vertedero “se multiplicaban cada día”. Llegaron a contabilizar hasta 72 en una mañana, con vertidos inertes procedentes de diversas obras de la Comarca. Son las únicas instalaciones públicas para el vertido de inertes, a las que llegan desde 2006 camiones de toda la Comunidad foral.

“Aunque han empezado a adecentar la otra zona, no hemos visto ningún cambio, siguen realizando su actividad. Estamos pendientes de que empiecen en el otro sitio pero de momento nada”, lamenta Óscar Amóztegui, alcalde de Galar. Por su parte Lorea Rodríguez, presidenta del Concejo de Esparza, asegura que no es que la situación sea la misma desde hace años, “es peor. Porque los camiones siguen llegando y los montículos no dejan de crecer. Firmamos ya en septiembre de 2021 el documento de acuerdo con la empresa para llevar a cabo la ampliación, y en un año todavía no han comenzado a verter ahí”, critica. El problema, añade, es que “no se ha dejado de verter en el actual, no se ha dado una solución a todo ese exceso ni se ha cerrado el vertedero y tampoco se ha propuesto una alternativa”, denuncia, con “impotencia y resignación. No será porque desde el Ayuntamiento y la Cendea no hayamos hecho todo lo posible por que ese vertedero deje de funcionar. Hay un exceso y nadie se hace responsable del incumplimiento de un PSIS”, señala.

Vertedero de Galar Oskar Montero

Expediente sancionador Cabe recordar que ya en mayo de 2020 el Consistorio recibió un informe pericial que señalaba que el incumplimiento era “muy grave” en un vertedero que “empezó con dos millones de metros cúbicos” y estaba ya por encima de los cinco millones”. Después los montículos superarían los seis metros en algunos puntos. Por eso el departamento de Medio Ambiente abrió un expediente sancionador, que se resolvió en septiembre de 2021 con una sanción de 22.500 euros para Recuperación Ambiental SL (REAM), que gestiona las instalaciones.

En el expediente también se indicaba que, con independencia de la sanción, se debería presentar un proyecto de clausura del vaso actual, de acuerdo con lo establecido en la normativa sectorial vigente, y la ampliación de la zona de vertidos inertes cuenta con su pertinente informe favorable, ya que para dejar de actuar en el vertedero actual y comenzar a hacerlo en la ampliación era necesario que desde el departamento dieran el visto bueno a un Plan de Restauración.

Así, desde el Gobierno foral han confirmado que, a mediados de abril, la entidad gestora dio inicio a los movimientos de tierras para preparar la parcela en la que vertirán a futuro. El plazo máximo para el inicio de las obras es de un año, contado a partir de la fecha de recepción de la resolución y con un plazo de finalización de tres años una vez hayan comenzado.

Están actualmente ejecutando la preparación del nuevo vaso, quedando pendiente la presentación del proyecto de sellado del primero, su acondicionamiento y posterior tratamiento de la superficie resultante para su reutilización como campos de cultivo.

Según señalan desde el Ejecutivo, todavía tienen que vallar el recinto y retirar la tierra vegetal para recuperar, en el futuro, su uso agrícola. La zona de pesaje y entrada y salida de camiones será la misma, ya que se trata de espacios aledaños, en los que está previsto que puedan verter de manera controlada 1.759.670 m³ de materiales inertes de Residuos de Construcción y Demolición (RCD). La superficie ocupada por la zona de vertido, incluyendo las zonas auxiliares, es de 413.473 m².