Un posible final de pruebas para la Real

La Real Sociedad encara los dos últimos partidos de LaLiga con una mezcla de incertidumbre, emoción y homenaje. La temporada, marcada por una segunda vuelta llena altibajos ligueros, se va a cerrar con toda seguridad sin el premio continental. Aún queda matemáticamente vida, dependiendo de lo que suceda este jueves con el enfrentamiento entre el Rayo Vallecano y el Real Betis, que puede dejar al conjunto txuri-urdin sin opciones matemáticas de alcanzar puestos europeos antes de recibir al Girona en Anoeta.

Por tanto, el encuentro del domingo ante el Girona podría tener un sentido muy diferente dependiendo del resultado del Rayo. Si los verdiblancos pierden al Rayo Vallecano, la Real llegaría sin opciones de alcanzar la octava plaza, quedando en tierra de nadie en la clasificación. En ese caso, el duelo ante los catalanes perdería gran parte de su carga competitiva y se convertiría más en un partido para cerrar la temporada en casa y despedir a Imanol que otra cosa.

El homenaje a Imanol: Insignia de Oro y Brillantes

Pase lo que pase en lo deportivo, el domingo tendrá un momento especial y merecido: Imanol Alguacil recibirá la Insignia de Oro y Brillantes de la Real Sociedad. Un reconocimiento reservado solo para figuras clave en la historia del club, y que premia no solo los éxitos deportivos del técnico oriotarra -con una Copa del Rey y cinco clasificaciones europeas consecutivas-, sino también su compromiso, identidad y el orgullo que ha devuelto al escudo estas 6 temporadas.

Con todo decidido el de Orio podría optar por introducir rotaciones en los dos últimos encuentros. Jugadores menos habituales como Mariezkurrena, Marrero, Jon Martín o incluso futbolistas que por lesión no han podido disfrutar de minutos como Odriozola y Zakharyan tienen opciones de jugar si todo el pescado llegase vendido.

Además. la visita al Santiago Bernabéu en la última jornada podría ser un déjà vu para los aficionados más veteranos. En la campaña 2003/04, la Real también llegó al coliseo blanco sin objetivos clasificatorios y Denoueix decidió rotar algunos futbolistas. Jugadores como Alkiza, Gabilondo, Boris o un joven Xabi Prieto asumieron galones en un partido que acabó con 1-4 y doblete del que a la postre sería leyenda de la Real. 21 años después las nuevas promesas del equipo pueden tener su oportunidad de nuevo.