Navarra

'Sésamo', la nueva bocatería libanesa de la Rochapea

Salah Dahmani, cocinero y propietario de Sésamo, la bocatería libanesa que acaba de abrir en el nº 30 de Marcelo Celayeta.

Desde este miércoles el barrio de la Rochapea cuenta con una exótica propuesta gastronómica. Comida libanesa en el número 30 de la calle Marcelo Celayeta. "Ofrezco el sabor que yo domino. Si comes aquí es como si estás en Líbano", defiende Salah Dahmani, orgulloso propietario del nuevo establecimiento. Se trata del bar bocatería Sésamo, nombre que homenajea a un ingrediente "presente en el 90% de los platos libaneses", dice.

En realidad Salah es argelino, pero trabajó muchos años en un restaurante árabe de Francia donde aprendió los fundamentos de la cocina libanesa: "Son muchos platos para degustar, es una cocina muy variada y para cualquier momento del día", explica este cocinero.

Llegó a Navarra en 2008, primero se instaló Estella y desde 2012 reside en el barrio pamplonés de San Jorge. Tiempo más que suficiente para dominar también nuestra cocina. "He trabajado un montón de años aquí y sé perfectamente lo que gusta. Por ejemplo, menos especias. También los dulces típicos, pero con menos azúcar. Tengo experiencia y sé lo que ofrezco. Es comida fresca, hecha al momento", afirma.

Salah llevaba tiempo detrás de un local propio en el que hacer lo que le gusta, y a los 45 años ha cumplido su sueño. El espacio es coqueto; cinco mesas y una futura terraza con cortavientos. La cocina también es pequeña, "perfecta para lo que quiero". Con una carta sencilla y conocedor de las costumbres del lugar, Salah explica que "todo lo que tengo lo puedo hacer en miniatura, la carta entera se puede transformar para degustar como pintxos". Y tiene buenas sensaciones en los dos días que lleva abierto: "La gente sale contenta cuando lo prueba".

Una carta sencilla

Ofrece entrantes calientes y fríos. A saber: hommus (crema de garbanzos y aceite de sésamo); baba ghannush (crema de berenjena y aceite de sésamo); musaka Libanesa (berenjena, garbanzos, tomate y cebolla); taboule (ensalada de perejil y burgul); fatte (nachos al estilo libanés); mohamara (crema de pimientos rojos asados y nueces); fatuch (ensalada de verduras, queso libanés y pan tostado); chakchuka (huevos rotos estilo libanés); sambusik (rollitos libaneses de carne, queso o pollo); kibbeh (croquetas de carne y burgul); falafel (croquetas de garbanzos y sésamo); y fatayer (empanadas de carne, queso o espinacas).

Después cuatro tipos de carnes: chichtaouk (brocheta de pollo marinado); chich kebap/kefta (brocheta de carne picada); chich Sujur (brocheta de carne de ternera); y cjawaneh (alitas de pollo al estilo libanés). También hay bocadillos de chawarma, chihtaouk, chich kebap, Falafel, Manakish Zaatar (pizzas con tomillo y semillas de sésamo tostadas, aceite de oliva y queso halumi) y tochka (panini de carne estilo libanés).

Y de postre hojaldres rellenos de almendras y miel, flan libanés con agua de azahar o pasta de quedayef rellena de queso y frutos secos.

"Pone su arte en la cocina"

Miren Ripa Alberdi conoce bien a Salah y confiesa que "tiene muy buen gusto, y no lo digo porque sea mi pareja. No prepara cualquier cosa de cualquier manera ni da comida por dar. Pone su arte en la cocina".

A Miren no le cuesta explicar por qué el Sésamo es un buen lugar para desayunar, almorzar, comer o cenar: "Es que está todo muy rico. Los hojaldres rellenos de carne, bocatas con salsas buenísimas... y todo fresco. Buenas carnes, brochetas... a todo el mundo le gustan estas cosas. Y hay que abrir la mente a nuevos sabores", argumenta. 

29/05/2021