La sociedad vasca, más solidaria e inclusiva

La sociedad vasca es más inclusiva y solidaria, incluso a pesar del efecto directo de la pandemia sobre muchas familias de la CAV. Lejos de una caída de la tolerancia, la sociedad vasca presenta una actitud más inclusiva y tolerante hacia las personas de origen extranjero. Así se desprende de los datos del Barómetro 2021 de Ikuspegi sobre percepciones y actitudes de la sociedad vasca hacia la población de origen extranjero.

En 2021 únicamente un 9,8% de la sociedad vasca considera la inmigración como problema para Euskadi, y solo un 2,3 % como problema personal, el dato más bajo de toda la serie.

En relación al modelo de integración social, la sociedad vasca sigue optando por un modelo asimilacionista por decantación o lo que se puede entender por un 'asimilacionismo amable'. Es decir, aún reconociendo que los procesos de integración demandan un esfuerzo compartido, la sociedad vasca deposita en la población inmigrante el mayor esfuerzo por adaptarse a nuestras costumbres y tradiciones.

Récord del indice de tolerancia

En 2021, el índice de tolerancia de la población vasca hacia las personas de origen extranjero marca su récord en el Barómetro de Ikuspegi, aumentando hasta los 66,09 puntos.

Siguiendo la estela del año pasado, la sociedad vasca ha respondido a la crisis sanitaria, económica y psicosocial provocada por la COVID-19 con una mayor tolerancia. 

La sociedad vasca muestra un menor grado de simpatía hacia el colectivo pakistaní, rumano y magrebí, una postura que se mantiene a lo largo de los años. Unido a ello, la población vasca muestra desconfianza hacia el islam.

En el caso de los rumores y los estereotipos falsos sobre la inmigración, siguen perdiendo peso y cada vez tienen menor presencia y apoyo social. Por primera vez son más las personas que rechazan el estereotipo de que las personas de origen extranjero se benefician excesivamente del sistema de protección social que las que lo apoyan.