Azpiazu abre el jueves la negociación presupuestaria pero ve difícil lograr apoyos en año electoral

Forma parte del paisaje político que los partidos de la oposición inicien la tramitación presupuestaria con opiniones críticas sobre el proyecto del Gobierno porque no es el suyo y tienen propuestas de mejora. Pero, en esta ocasión, se suma a la coctelera la proximidad de las elecciones vascas previstas para el primer semestre del año que viene, lo que quizás haya contribuido a aflorar declaraciones más categóricas como las que han pronunciado este lunes EH Bildu, que ve “agotado” al Ejecutivo de Iñigo Urkullu; Elkarrekin Podemos-IU, que cree que Ajuria Enea lanza señuelos en clave preelectoral con las inversiones en Osakidetza; o el PP, que sigue sin salirse del guion que ha mantenido toda la legislatura, que consiste en acusar al Gobierno vasco de prometer y no llegar a ejecutar nunca al completo las inversiones previstas. En ese delicado contexto, el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, ha abierto la ronda de comparecencias de los representantes del Gobierno en comisión parlamentaria para desgranar las partidas de sus departamentos con una apuesta por explorar “posibles alianzas”, a pesar de que PNV y PSE cuentan con una mayoría absoluta suficiente, pero no ha ocultado que en un año electoral “no es fácil” recabar más respaldos. Este mismo jueves iniciará su ronda con EH Bildu, Elkarrekin Podemos-IU, PP y C’s, con todos salvo Vox.

La intención de Azpiazu, según las fuentes consultadas, es verse con todos ellos el jueves. Las comparecencias de los consejeros dieron pie al Gobierno vasco a detallar y sacar brillo con partidas concretas a sus Presupuestos, como sucedió con la puesta en marcha de las ayudas a la emancipación juvenil, de 300 euros, que confirmó el propio Jonan Fernández para las primeras semanas o meses de 2024 dentro de una dotación total de 53 millones; los 7 millones para el Plan de protección integral a las mujeres frente a la violencia machista así como la inversión en vehículos policiales híbridos enchufables que reivindicó Josu Erkoreka, o las partidas que desgranó la socialista Idoia Mendia sobre el empleo y el incremento de la base de la RGI en un 5%, tras la aplicación por primera vez del nuevo índice de referencia. PNV, PSE y Podemos-IU pactaron hace un año actualizar la prestación tomando como referencia la Encuesta de Pobreza y Desigualdades Sociales de Euskadi.

Azpiazu alcanzó un acuerdo con EH Bildu para aprobar los Presupuestos de 2022 pero, desde entonces, solo PNV y PSE los han apoyado. El año pasado, la negociación quedó varada en el punto de la reforma fiscal que le exigía la oposición y donde Azpiazu les remitió a las Juntas Generales de los territorios, que son quienes tienen la competencia, aunque adelantó que PNV y PSE comenzarían su reflexión este año. Por la parte de Podemos se han añadido en los últimos años otros obstáculos, como la exigencia de una empresa pública de energía, que para el Gobierno de Urkullu es una propuesta de máximos.

Azpiazu admitió este lunes que “no es fácil en año electoral recabar apoyos”, pero tiene “confianza en que todos sabremos estar a la altura de las circunstancias y Euskadi se pueda convertir en el reflejo de lo que la política debiera ser”. Se apoyó en los tiempos de incertidumbre, marcados por los conflictos bélicos y la inflación, y recetó ante ellos “una apuesta firme por garantizar y mejorar la calidad de vida en Euskadi, con gran crecimiento en Osakidetza, potenciar su desarrollo económico y la creación de empleo”. Los Presupuestos vuelven a exhibir cifras de récord, 15.025,4 millones, un 5,4% más que los aprobados para este año. La fecha marcada para su aprobación en el Parlamento es el 22 de diciembre. 

Críticas de EH Bildu

Desde EH Bildu, Nerea Kortajarena dijo tener “la sensación de un gobierno agotado que no conecta con la ciudadanía ni con sus necesidades”, que presenta unos Presupuestos “poco o nada ilusionantes, de tirar la toalla”. Por ejemplo, argumentó que se apuesta por situar el paro por debajo del 10% cuando en junio ya era del 7,4%, y aseguró que “los recortes y la privatización de servicios no tienen por qué convertirse en algo rutinario”. Dijo que en los tres territorios hay recursos para elaborar otras Cuentas.

Las partidas

Por parte de Lehendakaritza, sus secretarios desgranaron las partidas de 107.317.000 euros. Destaca el programa Emantzipa para que los jóvenes de entre 25 y 29 años con un determinado nivel de ingresos tengan una prestación de 300 euros durante dos años, y que estará dotado con 53 millones. No se abrirán nuevas delegaciones exteriores en plena incertidumbre global, pero sí se abrirá este año una comercial en Quebec, y otra en 2024 en Australia.

Seguridad contará con 790.157.000 euros. Destacan los 24,1 millones para el incremento retributivo y la carrera profesional de la Ertzaintza, 22,5 para la transición energética en vehículos policiales y edificios, 2 para Cyberzaintza, 7 para el Plan de protección a las mujeres, y 62.194 euros para la coordinación policial en ese ámbito y evitar la peregrinación entre instancias.

Trabajo y Empleo dispondrá de 1.177 millones. Se incluye el proyecto para analizar el impacto de la reducción de la jornada en la productividad y el bienestar del trabajador, así como programas para incorporar a 800 personas al mercado laboral a través del arraigo social y por formación. Subirá en un 5% la base de la RGI.