Osasuna se lo sigue creyendo en plena cuenta atrás

Que Osasuna nunca se rinde es una evidencia. Y que no se deja llevar en vísperas de un acontecimiento como el de la semana próxima, también. Lo que Jagoba Arrasate luce a gala con que la mejor preparación futura es el mejor rendimiento presente quedó demostrado anoche en el Nuevo Mirandilla. Ambición y sufrimiento se unieron para derrotar al Cádiz, y así no se descuida la gran campaña liguera que se está cuajando con el horizonte de la histórica fecha del próximo 6 de mayo en La Cartuja sevillana.

Los cambios refrescaron al equipo. Doble misión cumplida, porque, por un lado, la savia usada sirvió para llevarse los tres puntos, y por el otro, se va dosificando físicamente a quienes buscarán la primera Copa de la historia dentro de diez días ante un Real Madrid que, al menos en Liga, está mostrando debilidades, y muchas. Lo que, unido al punto competitivo que se está recuperando, que este Osasuna podrá perder pero no lo hace, y si lo hace, es con el rival sudando de lo lindo, este grupo de gladiadores se lo sigue creyendo a medida que la estelar cita se va acercando. Se ve posible la primera Copa de la historia.

El choque se decidió en el detalle que llegó en el minuto 62. La destacada acción de Manu Sánchez propició un pase hacia Rubén García, cuyo disparo acabó en el marco de Ledesma. La ambición por ir a por el partido provocó cobrar ventaja, y el sufrimiento de los últimos minutos hizo el resto. Abde acababa de entrar en el campo y se llevaba por delante a Iza Carcelén, y la patada se transformó en roja. Hasta no hizo falta agotar el cupo de sustituciones, se aguantó el tipo, en un choque en el que canteranos como Iker Benito, Pablo Ibáñez e Iker Muñoz rayaron a similar altura a la del resto ante un cuadro, el amarillo, que vuelve a asomar peligrosamente al precipicio de la Segunda división.

Arrasate: "Otro gran desgaste para una victoria muy importante"

Jagoba Arrasate valoraba en su justa medida lo visto sobre el césped gaditano y ponía en valor lo hecho por sus hombres. "No he visto que un equipo se podía jugar más que otro, en eso somos muy honestos. El equipo ha competido muy bien. El Cádiz ha tenido dos ocasiones pero el partido se ha ido equilibrando. Hemos tenido la suerte de adelantarnos y nos hemos defendido bien, incluso con uno menos. Somos trabajadores y se ha hecho un gran desgaste otra vez. Para nosotros es una victoria muy importante", subrayaba el técnico vizcaíno.

Antes de afrontar el viaje más ilusionante de los últimos 18 años, queda el envite del derbi ante la Real Sociedad, en El Sadar y este viernes (21 horas).