Miren Basaras: "Pensar en la normalidad es algo muy preocupante"

Euskadi sigue en situación de emergencia sanitaria y aunque hemos comenzado lentamente el descenso de la sexta ola, queda un largo camino por recorrer para tener una situación controlado. De ahí que en opinión de la gran mayoría de expertos sea necesario mantener las actuales restricciones. De esta opinión es la microbióloga y responsable covid de la UPV-EHU Miren Basaras. "La asistencia sanitaria está aún muy presionada y debemos hacer un esfuerzo con las restricciones", señala y da un dato que debería hacernos reflexionar. "No tenemos que olvidar que desde que hay emergencia sanitaria, en dos meses han fallecido más de 500 personas por covid". 

Restricciones y pase covid

Unos datos muy "preocupantes" subraya Basaras que considera aún "muy prematuro" empezar a hablar de cambio de escenario o de una convivencia normal con el coronavirus. "El virus nos ha dado una patada diciendo que aquí estoy yo infectando a muchas personas. Pensar que cuando el virus está en fase expansiva y con virulencia, pensar en la normalidad es algo muy preocupante", advierte y pide no banalizar ni este virus ni el de la gripe porque "falta protección importante" a nivel mundial y desconocemos si surgirán nuevas variantes más preocupantes.. "Tenemos que intentar tener transmisión comunitaria baja", recomienda. 

Preguntada por el mantenimiento y extensión del pase covid se muestra favorable pero insiste en que es "una medida más" y que por sí solo no vale. En su opinión, en un entorno con todos vacunados y sumado las otras medidas básicas, ese pase covid puede hacer disminuir el riesgo..

Ómicron sgilosa

Asegura que la llegada de ómicron no le ha sorprendido porque la posibilidad de que llegara una variante más contagiosa o virulenta siempre fue real para todos los expertos. Y en este mismo sentido considera que hay que estar atentos a la evolución de la ómicron sigilosa, esta subvariante que por ejemplo, en Dinamarca, ya ha tenido un impacto importante. Por eso considera que es muy importante hacer un "control exhaustivo" de la situación en cada lugar y secuenciar. 

En este sentido no las tiene todas consigo con el nuevo protocolo de Osakidetza en el que no se registran todos los positivos en el sistema de salud. "Es una decisión controvertida", afirma. " Entiendo que en esta situación, la presión para detectar es muy alta pero sí creo que deberíamos conocer todas esas personas positivas, haciendo esfuerzo máximo". De hecho recuerda que a estas personas les cambia su protocolo de vacunación .y alerta sobre que se vaya dejando a la población "tomar decisiones" cuando mucha gente duda y no sabe qué hacer. 

Tercera dosis

Respecto a la vacunación, considera acertado retrasar la tercera dosis a los cinco meses de haber superado la infección porque recuerda, nuestras células tienen memoria pero no sabemos cuánto dura la inmunidad. Aclara que con los diferentes tipos de coronavirus no ocurre como con otros virus y otras vacunas que la inmunidad dura de por vida. Lo importante, matiza, es que esa tercera dosis llegue a los más vulnerablkes

Reconoce el debate sobre si es o no necesario dar esa dosis de refuerzo a toda la población adulta pero se muestra partidaria a priori porque tenemos una transmisión muy alta y los últimos estudios publicados dicen que en los lugares con transmisión alta conviene incluir esa dosis de refuerzo es lo adecuado. 

En cuanto a la vacunación infantil recuerda que ha cambiado el protocolo. Entiende el recelo de muchos padres y madres por los cambios constantes pero afirma que no es un cambio de opinión sino que hay que hacer las actualización en base a evidencias científicas y esas ahora mismo dicen que hay que poner la vacuna a un niño que ha pasado el covid, a las ocho semanas.