Tras una semana oscura y lluviosa en el Cantábrico, la luz volvió en un sábado precioso con la Regata del Gallo, uno de los eventos de vela más esperados de cada temporada que ofrece la imagen más espectacular y fotografiada a su paso por el Puente de Bizkaia. Las aguas vizcaínas del Abra albergaron de nuevo, una de las regatas más especiales y participativas que fue ganada por el Akelarre de Mauricio Guibert en la clase Regata, el Nexus de Javier Trueba en Crucero I, el Kohen de Juan Carlos Estefanía en Crucero II y el Biobizz de José Azqueta en la división J80 entre los casi cien barcos que navegaron en un día con viento flojo del sureste al principio, para llegar después hasta los ocho nudos en una jornada impresionante. Como se comprobó un año más, esta apasionante prueba, que transcurrió muy rápida, se ha convertido en uno de los referentes del deporte vizcaíno en estas fechas desde hace cuatro décadas. Este año significó el mejor colofón al 125º Aniversario del Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club, organizador de esta cita.
La magnífica estampa que mostraron decenas y decenas de cruceros navegando bajo el puente Colgante, con sus velas de muchos colores desplegadas al viento, fue retratada por muchos aficionados y paseantes que se colocaron en las dos orillas de la Ría, en las que hubo música en directo, talleres y exhibiciones de vela y un gran ambiente. En esta edición tan especial, en el programa de actos, tuvo lugar una Regata del Gallo de traineras con la participación de Kaiku, Zierbena, Lekittarra y Ondarroa en el campo de regatas de Portugalete y Santurtzi en un formato de contrarreloj por parejas. La Lekittarra pasará a la historia como ganadora de esta Bandera del Gallo.
Mágico grupo de barcos
Al mediodía se observó a un mágico 'pelotón' de embarcaciones de las clases crucero y monotipos J80 que navegaron en esta Regata del Gallo desde la dársena de la Benedicta de Sestao para cruzar el emblemático puente de Bizkaia. Una vez pasada esta construcción histórica, Patrimonio de la Humanidad desde 2006, las tripulaciones y sus barcos tomaron su rumbo hacia las aguas del Abra, donde completaron un recorrido de ocho millas para decidir a los últimos ganadores del año 2023 en este evento en el que se ha volcado el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club, que puso el punto final a lo grande en su 125º Aniversario. El paso por el mítico puente fue de nuevo espectacular, al proyectar una imagen fantástica en esta fiesta anual de la vela.
Medio millar de regatistas
Unos 500 regatistas hicieron que esta Regata del Gallo fuera la más concurrida de cada temporada de vela junto a la Regata a la Inversa del primero de mayo. Muchas personas se situaron en las orillas de Portugalete, Santurtzi y Las Arenas para fotografiar a este maravilloso grupo de barcos. Fue la instantánea más perseguida antes de enfilar las aguas del Abra. Casi toda la flota vizcaína estuvo presente en una regata cuyo colofón tuvo lugar después en el Real Club Marítimo del Abra-Real Sporting Club, con la entrega de premios y la clásica y sabrosa alubiada.