El suicidio es la primera causa de muerte no natural en el Estado. Sin embargo, no protagoniza titulares ni ocupa mucho espacio en radio y televisión. Tuvo que llegar la pandemia para que empezáramos a hablar de forma más directa de una cuestión que, tristemente, nunca ha dejado de estar de actualidad. En 2020, se suicidaron 3.941 personas en el Estado. En 2021, fueron 11 personas al día. Ha aumentado especialmente en las franjas de edad más jóvenes, incrementándose un 134% en los adolescentes de 10 a 14 años.
Un tema difícil, históricamente, que hoy hemos abordado en nuestros 'Asuntos Internos' con el centro de psicoterapia Erain, centro especializado en Terapia Gestalt en Bilbao. Iñaki García Maza, psicólogo del centro, ha explicado que, durante mucho tiempo, se tuvo miedo al 'efecto Werther', el efecto llamada o el miedo a que la idea del suicidio se propagara por informar de algún caso.
Con todo, informar sobre el suicidio con rigor, sin romantizar y analizando las problemáticas puede servir para que quienes tengan ideas suicidas sepan que hay alternativas. ¿Cómo identificar esas ideas, a esas personas? Es altamente complejo, porque no hay una sola causa. García Maza señala: "No podemos hablar de prevención del suicidio si no hay una red asistencial que dé la alarma". Por eso, llama a tener los radares abiertos: "Es importante cuidar la escucha emocional. ¿Es posible prevenir el suicidio o detectarlo a tiempo en una sociedad tan individualista como la que tenemos? Estamos hablando también de prevención de la soledad, de dificultades de salud mental...Debemos hacer una reflexión a nivel colectivo y preguntarnos qué recursos públicos y sociales tenemos".