A medida que la vacunación avanza, el debate sobre cuándo llegará el momento de deshacerse de las mascarillas va cogiendo fuerza. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se ha mostrado "convencido de que allá por el mes de julio, agosto" será posible dejar de utilizar la mascarilla contra la pandemia de coronavirus en exteriores.
"Si todos seguimos durante las próximas seis, ocho semanas con la prudencia que aconseja la situación, estoy convencido de que allá por el mes de julio, agosto empezaremos otra vez a poner cara a todas las personas que vamos por la calle", ha apuntado, al término de un acto en Santiago.
Al final de su intervención, Núñez Feijóo ha precisado que, en su opinión, "en lugares cerrados no será posible", pero ha apuntado al deseo de "ir mudando la mascarilla por la faz" en exteriores y su convencimiento de que "en seis, ocho semanas" se podrá hacer de seguir "la prudencia que aconseja la situación".
Por su parte, Rafael Bengoa, ex consejero vasco de Sanidad y asesor internacional en políticas de Salud, ha pronosticado en ETB cuándo podría dejar de ser necesario el uso en el Estado de la mascarilla en exteriores. "Yo creo que lo que va a ocurrir es que, como la campaña de vacunación va bastante bien, a final de junio o principios de julio las autoridades podrán decir que en todos los espacios exteriores, deporte, bares exteriores... podremos estar sin mascarillas". Sin embargo, en cuanto a los interiores, todavía seguiría siendo obligatoria. En otoño podría ser ya un acto voluntario.
Cuando el 70% de la población esté vacunada
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha defendido este miércoles que el proceso de vacunación va "muy bien", pero el futuro no solo lo determina la vacunación. De ahí que haya avisado de que dejar de usar la mascarilla supondrá "dar un paso atrás", hasta que al menos no haya más de un 70 por ciento población vacunada.
Simón ha defendido que el futuro pasa por la vacunación y por mantener las medidas de control el tiempo suficiente hasta que la vacuna permita controlar el problema.
"La vacunación va bien, pero el futuro no lo determina solo la vacunación. La inmunidad no solo se puede obtener por vacuna, porque no todos los vacunados se inmunizan, también por haber pasado la enfermedad", ha precisado Simón. Así, según la previsión del Gobierno español, llegaría en los próximos 3 meses, ya que Sánchez aseguró este lunes que en 100 días se llegará a la llamada inmunidad de rebaño.