Athletic

"A los candidatos les estamos quitando un peso de encima si se aprueban los nuevos estatutos"

Josu Arteta y Gorka Cubes.
Josu Arteta y Gorka Cubes.

Antes de que la carrera electoral cope todo los flancos de la actualidad rojiblanca, el lunes en el palacio Euskalduna (19.30 horas) los compromisarios del Athletic dirimen uno de los asuntos más peliagudos de la última década en la vida institucional del club: la reforma de los estatutos. Arteta y Cubes, junto a Aitor Elizegi, Ana Urquijo y Aner Uriarte, han formado parte de la Comisión de Reforma del nuevo reglamento. Estos dos socios no dudan en defender las bondades del texto, que busca "democratizar" la entidad. Necesitan al menos dos terceras partes del apoyo de los compromisarios.

¿Ha merecido la pena tantas reuniones en estos dos años de trabajo?

-Josu Arteta: Sí, porque me he encontrado a gente maravillosa a mi lado y por el trabajo final que hemos desarrollado. Lo hemos hecho por amor a los colores, como dirían los futbolistas.

-Gorka Cubes: Ha sido inolvidable. Esperemos que sea para bien, pero va a ser una de las experiencias de mi vida.

La pandemia les pilló de lleno durante los debates. ¿Pensaron en algún momento 'pero dónde me he metido'?

-J. A.: Nunca, con la pandemia habilitamos los medios telemáticos, precisamente los que queremos impulsar en los Estatutos. Nunca ha habido ningún momento de arrojar la toalla.

¿Por qué los compromisarios tienen que votar sí al texto?

-G. C.: Está la manida modernidad, que cuando a uno le viene a la cabeza lo relaciona con los medios digitales. Lo que nosotros entendemos es que la modernidad viene a través de conceptos más profundos, como puede ser la integridad, la rendición de cuentas, el gobierno abierto, la transparencia,€ Esos han sido elementos que hemos tenido muy en cuenta y que queríamos impulsar. Creemos que lo hemos conseguido.

¿Han notado en las reuniones con los socios que son receptivos a su trabajo?

-J. A.: Sí. Y, sobre todo, cuando ellos han visto que hemos sido muy receptivos. Hemos contestado a todas las sugerencias que se nos han hecho y hemos aceptado la mayoría de las propuestas que se nos han planteado, pero creo que tanto los socios compromisarios como los socios de a pie, que también han hecho propuestas, o los socios que han leído cuatro pinceladas de lo que significan estos estatutos, su ánimo es positivo de cara a aprobar esta reforma.

Lo mismo pensaban Fernando García Macua, en 2011, y Josu Urrutia, tres años después. Pero no sacaron adelante la reforma estatutaria.

-J. A.: Eran otras circunstancias temporales. En aquel momento había un presidente que se podía arrogar ese triunfo, esa medalla de aprobar los estatutos. Ahora no hay un presidente que se pueda poner una medalla de esa aprobación de los estatutos, porque el presidente y su junta directiva han presentado la dimisión. Desde el primer momento se ha dejado bien claro que estos no son los estatutos de la junta directiva o de Elizegi, son los estatutos del Athletic.

Pero es un proyecto marcado e impulsado por la figura de Aitor Elizegi. Es uno de los planes estrella de su mandato.

-G. C.: En el anterior proceso electoral, los dos candidatos que se presentaron llevaron en su programa la reforma de los estatutos. Es decir, si hubiese ganado el otro candidato, también lo hubiera impulsado. Es un clamor que los estatutos se deben transformar. Aitor Elizegi los ha impulsado porque le ha tocado. Nosotros desde el primer momento hemos entendido que es un proyecto de club. Aquí estamos Josu y yo que nos nombró la Asamblea, no Elizegi.

-J. A.: Dos compromisarios que no hemos sido votantes de Aitor Elizegi (entre risas).

¿La participación de Aitor Elizegi en la comisión de reforma les ha condicionado en algún aspecto?

-J. A.: Ni ha condicionado ni ha pretendido condicionar.

-G. C.: Lógicamente, ha aportado como todos. Hemos hecho un trabajo colegiado entre los cinco.

¿Puede tener problemas como institución el Athletic si no actualiza sus estatutos?

-J. A.: Claro que sí, muchos problemas de funcionamiento. Habría mucha gente que no podría dar su opinión, como ahora se pretende hacer con los referéndums, con llevar asuntos a la Asamblea Plenaria. Intentamos democratizar el club. Tenemos unos estatutos de los años noventa, que carecen de muchas figuras de control que ahora estamos recogiendo, como el defensor del socio, la comisión de transparencia y buen gobierno, temas de la buena gobernanza, vacíos legales que existen en los actuales, sobre qué pasa si no se aprueban las cuentas en dos ocasiones seguidas€ Si cualquiera de los socios diría estáis haciendo algo que no está regulado, me voy al juzgado. Lo podría hacer. Hasta ahora hemos tenido la suerte de que ningún socio ha ido a buscar algo que no está recogido en los estatutos.

-G. C.: Es que en los actuales hay muchos vacíos legales, no están recogidos aspectos, otras cuestiones están sujetas a interpretaciones...

Son los 1.200 socios compromisarios que tiene el Athletic los que deben dar el visto bueno a los nuevos estatutos. Pero se les quita poder, un tema que puede condicionar su voto el lunes.

-J. A.: No se les quita poder, al contrario, se le potencia. Si hay un órgano que pierde peso específico, es la junta directiva, porque tiene mayor control tanto por los socios de a pie como por los compromisarios.

-G. C.: Se potencia su poder. Si realmente alguien se quiere comprometer con el Athletic, se le facilita ser compromisario.

En el entorno del club está el debate de un socio, un voto, algo que han introducido de alguna manera con la Asamblea Plenaria. ¿Lo otro era imposible?

-J. A.: Si hubiésemos puesto la Asamblea Plenaria para todos los puntos de gestión sería imposible. Muchas de las cosas del día a día se delega en los compromisarios.

Les pongo un ejemplo. Si el 10% de los socios recogen las firmas necesarias porque no están contentos con la gestión del presidente, ¿pueden convocar una Asamblea Plenaria para echarle?

-G. C.: Pueden transformar la Asamblea Ordinaria en Plenaria, sí, perfectamente.

Que las elecciones a la presidencia se celebren dentro de un mes no propicia el mejor escenario para votar un tema tan importante.

-J. A.: Nosotros hemos seguido nuestro ritmo, no hemos seguido el calendario electoral. Si no hubiésemos tenido la pandemia, seguramente lo habríamos presentado antes. Si queríamos elaborar un trabajo en el que se diese voz, que se escuchase y se contestase a todas las opiniones de los socios, menos del tiempo que nos ha llevado es imposible. Pero el momento elegido para someter a votación los estatutos creo que es hasta bueno para el presidente que vaya a salir elegido, porque es un tema en el que no va a tener que quemarse al presentarlo.

¿Pensaron, para evitar el ruido electoral, en dejar el texto para que el próximo presidente lo llevará a la Asamblea. Al final es un trabajo para el club, como ustedes dicen.

-G. C.: Nos encontrábamos con una cosa, que el presidente entrante no hubiese tenido que presentar un aval, y nosotros queremos una garantía para el club. Tenemos que estar por encima de los personalismos. No es ni Elizegi, ni Barkala, ni Arechabaleta, son los estatutos para el Athletic.

¿Creen que los dos candidatos a la presidencia están a favor del nuevo reglamento?

-J. A.: Han dicho que son unos estatutos muy trabajados y que consideran que es necesario aprobar unos nuevos estatutos. Me quedo con eso.

G. C.: Yo creo, francamente, con toda sinceridad que si se aprueban los nuevos estatutos a los candidatos les estamos quitando un peso de encima, porque estamos regulando un montón de cosas que les van a facilitar su gobierno. Y, sobre todo, que si no se aprueban, les va a tocar lidiar con unos estatutos viejos, les estamos quitando trabajo.

Egoístamente, a ellos les beneficiaría que no se aprobaran porque, por de pronto, el ganador no tendría que avalar el 5% del presupuesto, unos siete millones de euros en este momento.

-J. A.: Para mí, si alguien piensa así, está en contra de los intereses del club. Para mí esa persona no puede ser presidente del Athletic. Sería muy triste que de cara al exterior del club diésemos la imagen de que somos incapaces por tercera vez de aprobar unos estatutos que, jurídicamente hablando, han sido vistos revisados por gente ajena y los han considerado impecables.

¿El nuevo reglamento tiene más herramientas para penalizar a los dirigentes del club que no ejerzan una gestión económica correcta?

-G. C.: Estamos regulando mucho más que el régimen de avales. Planteamos una herramienta novedosa en el club que es la comisión de transparencia y buen gobierno, nombrada por la asamblea, que es un órgano independiente que va a poder fiscalizar la gestión de las juntas directivas.

¿Por qué si se aprueban los nuevos estatutos no se aplican totalmente en las elecciones del 24 de junio?

-G. C.: El club es imposible que se adapte en tan poco tiempo a cuestiones como el voto digital y otros asuntos que se recogen sobre las elecciones.

Se recoge la posibilidad de que los directivos e incluso el presidente sean remunerados por su condición. ¿Cómo lo explican?

-J. A.: Creo que una persona que es presidente del Athletic tiene que dejar de trabajar en su puesto de trabajo, y damos la posibilidad de que no solo el que tenga posibles económicos pueda ser presidente del Athletic. Siempre y cuando se apruebe por la Asamblea de compromisarios se podrá poner sueldo a miembros de la junta.

No han querido mojarse mucho a la hora de especificar la filosofía del club.

-G. C.: Sí lo hemos hecho. Teníamos claro que había que recogerla de alguna manera, porque no aparece por ningún sitio. Hicimos una redacción en la que pretendíamos más o menos que todo el mundo se viese representado y ni para atrás, no acertamos ni a tiros. Evidentemente, estábamos tocando el tuétano. Lo que decimos es que "el Athletic Club se guiará para el desarrollo de su actividad por el respeto a su tradicional filosofía deportiva".

Pero no aclara, por ejemplo, si un riojano puede jugar en el club, o que si el nieto inglés de un vasco encaja en la filosofía. Es una generalidad.

-G. C.: Tiene un gran peso, porque ya está plasmado.

-J. A.: Nosotros intentamos ser más explícitos y vimos que cada uno de los 43.000 socios tiene una idea de lo que es el club.

¿A San Mamés se le podrá cambiar el nombre o lo blindan?

-J. A.: Si se quiere cambiar el nombre, tiene que ser votado por la Asamblea Plenaria. Si se quiere modificar el apellido, es la Asamblea de compromisarios la que decide.

2022-05-21T16:54:02+02:00
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