Se formó en Arquitectura y siempre le han apasionado la decoración, las joyas antiguas, el arte y las antigüedades. La mezcla de todas esas pasiones la llevaron a formar parte de Sophie et Voilà, firma de moda nupcial que ofrece colecciones prêt-à-porter y prendas a medida. Ahora, ha decidido tomar un nuevo rumbo profesional con su propio atelier, Arribas Garamendi.
Arribas Garamendi es un atelier pero es también un club. En Onda Vasca con Txema Gutiérrez nos ha explicado que, cuando entregaba vestidos de novia, se quedaba con una sensación agridulce: "Vives durante 6, 8, 10, 12 meses un proceso superíntimo con una persona, con una mujer que se va a vestir para su gran día, que te cuenta cosas que igual no le está contando a nadie más, tú guardas su mejor secreto el día de su boda. Eso se acaba el día que tú le das el portatrajes y nunca más nos vemos, era como superabrupto. No volver a vernos era un poco raro, un poco feo. Siempre me ha rondado la cosa de decir, "Tenemos que volver a vernos." El club es realmente ese volver a vernos".