Pradales promete menos filtros para ser atendido en los ambulatorios

Imanol Pradales se quiere presentar como un candidato a lehendakari que, en lugar de tener en la mano una calculadora de resultados electorales y de pactos, tendrá un cuaderno de proyectos y de aportaciones de la sociedad. En ETB-1, en su primera entrevista tras ser proclamado aspirante el pasado sábado en Durango, el jeltzale se ha desmarcado este lunes de la estrategia del socialista Eneko Andueza y del candidato de EH Bildu, Pello Otxandiano; no quiso especular con los posibles pactos tras los comicios ni entrar en el barro o en el debate de la lista más votada, y sus respuestas más prolijas las ofreció cuando habló de gestión y de sus propuestas, con la intención de reflejar que su preocupación y su prioridad se encuentra en ese terreno. Nuevamente con la intención de presentarse como un candidato con los pies en la tierra y sensible a las quejas que se han formulado sobre la gestión institucional, Pradales reconoció expresamente que quizás haya “muchos filtros” a la hora de ser atendido en los ambulatorios, se comprometió a mejorar en ese terreno y planteó también reducir las listas de espera.

El lehendakari Urkullu ya se comprometió en el pleno de política general de septiembre a reducir las listas de espera para ser operado en los hospitales, además de situar los tiempos por debajo de las 48 horas en atención primaria, en los ambulatorios, y elevar las citas presenciales del 61% al 70%. El propio Pradales puso en valor que las listas de espera han bajado de los 85 días a los 60, y de su boca no salió ningún reproche a su predecesor, pero apostó por seguir mejorando y reconoció, de manera muy explícita con una experiencia personal, que hay que agilizar los filtros. Y apostó otra vez, como hizo el sábado, por buscar soluciones en comunidad, con los propios profesionales, y dar el salto hacia un “nuevo nivel de bienestar”.

“Tenemos un sistema fuerte en general, pero es verdad que hemos tenido una pandemia y han quedado heridas en el sistema. Hay que curar esas heridas. Pero se tiene que hacer con los médicos, con las enfermeras, no solo desde el Gobierno. Hay que ver dónde están las carencias”, dijo, para añadir después que, en estos días donde los virus han vuelto a correr como la pólvora, ha tenido que acudir a Osakidetza con su hija y “el servicio ha sido sobresaliente” con la niña. Hasta ahí, todo correcto. Pero añadió que en ocasiones hay “problemas en los ambulatorios” y “muchos filtros”. “A lo mejor esos filtros tienen que ir desapareciendo”, añadió.

De sus palabras parecía desprenderse cierta autocrítica y, por ello, se le preguntó si estos problemas se deben solo a la pandemia, o también a otros factores. Pradales, sin embargo, lo atribuyó al cambio demográfico en la sociedad, que ha envejecido, lo que a su vez tensiona el sistema sanitario. “Necesita una transformación, pero sin hacer tonterías”, dijo. ¿Es una enmienda a la totalidad de la gestión del Gobierno vasco? No. Como viene haciendo el PNV desde el sábado, Pradales lo definió como una “evolución”. Si obtiene la confianza de los vascos en las elecciones, empezará con “la atención primaria, los ambulatorios”, y con las listas de espera.

Pradales rechazó los populismos y los mensajes que difunden que hay dinero para todo, “feriantes del mercado” que prometen algo que después no pueden cumplir. Y, cuando se le preguntó sobre los pactos, aseguró que todavía no conoce la fecha de las elecciones y que está centrado en el programa. Tampoco quiso aclarar si cree al socialista Eneko Andueza (con quien su partido mantiene acuerdos en las principales instituciones), cuando dice que no hará lehendakari al candidato de EH Bildu: “Andueza habla mucho, todos los fines de semana. Cada uno será esclavo de sus palabras. Mi único objetivo son las propuestas y el programa”. Tuvo la misma actitud con el globo sonda de Otxandiano, quien apuesta por dejar gobernar a la lista mas votada: “Está centrado en las elecciones, pero no en escuchar a los ciudadanos o desarrollar proyectos. Yo no estoy en ese escenario, con la calculadora todo el día”.

A favor del Guggenheim Urdaibai

En una clave más vizcaina, confirmó que él está “a favor del proyecto Guggenheim Urdaibai” y cree que tiene “viabilidad”, aunque también ve las complejidades porque hay que tramitar los permisos urbanísticos y ambientales. Vendrán ahora dos años “con tramitaciones complejas” y procesos participativos. Este es un asunto delicado donde, en ámbitos ajenos al PNV, han aireado la existencia de una contradicción con las palabras del lehendakari Urkullu quien, siendo fiel a su prudencia habitual, ha primado la cautela y no ha llegado a anticipar si el proyecto es viable. No obstante, Andoni Ortuzar ya zanjó las especulaciones la semana pasada al asegurar que todo el PNV está a favor.

El candidato a lehendakari, además, aseguró que dejará su cargo como diputado foral de Infraestructuras “el mismo día en que el lehendakari convoque las elecciones”. Sobre la forma en que conoció su candidatura, de manera atropellada por las filtraciones a la prensa, admitió que no es una situación “agradable”, pero se ha sentido arropado por el “apoyo de mucha gente” en el proceso interno y eso le da “tranquilidad”.