El Parlamento de Navarra va a hacer un cambio en las subvenciones que otorga a los grupos parlamentarios, y que cada año cuestan unos tres millones de euros en total.
A partir de la próxima legislatura, los grupos parlamentarios van a tener que firmar un convenio con sus respectivos partidos políticos para poder hacer uso de ese dinero con las garantías legales reforzadas.
La reforma nace de las peticiones que en los últimos tiempos han venido haciendo tanto el Tribunal de Cuentas, encargado de fiscalizar las cuentas de los partidos, como la Cámara de Comptos, el órgano fiscalizador de las cuentas públicas navarras.
Ambos órganos han puesto el foco sobre una realidad: que la mayoría del dinero que ingresan los grupos parlamentarios en virtud de su representación se utiliza, además de para sufragar los gastos del grupo, para financiar el resto de las actividades de todo el partido político.
Lo constata el Tribunal de Cuentas en su moción 1445, publicada en 2021, donde en base a datos de 2016 –vigentes porque la práctica no ha cambiado desde entonces– asegura que más del 70% de las subvenciones totales concedidas a grupos parlamentarios tanto de Cortes Generales –Congreso y Senado– como asambleas autonómicas se transfieren como aportaciones a las formaciones políticas.
Pero que sea una práctica generalizada no significa que no haya que mejorar en garantías. Más o menos es compartido que ese dinero sirve para que los partidos funcionen tal y como los conocemos ahora: con tanto dinero como representantes tienen. Pero ahora los organismos de control piden un refuerzo jurídico para que quede claro que ese dinero se puede emplear de esa forma. El Parlamento de Navarra ha adoptado el acuerdo hoy y en pocos días será oficial en el Boletín Oficial de la Cámara.
Visto bueno de los Servicios Jurídicos
La modificación es muy sencilla. El Parlamento, en base a un informe de Intervención que cuenta con el visto bueno de los Servicios Jurídicos, propone “actualizar la norma incluyendo las recomendaciones de la Cámara de Comptos y el Tribunal de Cuentas”.
Para ello, redacta un párrafo que se añade a las normas de asignación económica de los grupos parlamentarios. El párrafo es el siguiente: “Los Grupos Parlamentarios presentarán en el Servicio de Intervención y Asuntos Económicos, junto con las Cuentas Anuales, el convenio de colaboración formalizado con los partidos políticos, en el que se recojan los servicios que las formaciones prestan a los grupos, con una valoración económica de los mismos”. Algo que deberá hacerse cada año para actualizar “el importe a aportar para compensar el coste de dichos servicios”, detalla el Tribunal de Cuentas en la citada moción.
Esto se hace para que las subvenciones puedan constituir una contrapartida por los “servicios prestados” por los partidos al servicio del funcionamiento de los grupos, explica la Cámara de Comptos en su informe de fiscalización de cuentas del Parlamento del año 2021, donde ya dibujaba esta recomendación dado “el caracter finalista de las subvenciones que se otorgan a los grupos parlamentarios”.
Casi tres millones
El Parlamento dispone de algo más de tres millones de euros para transferencias a grupos en este 2023, año en el que se ha subido un 2% la subvención. La Cámara paga, cada mes, 241.078 euros a los grupos. Hay una cantidad fija y luego una serie de variables. Por gastos de funcionamiento se otorgan 1.520 € por parlamentario al mes. Por gastos de organización, 1.163 por escaño al mes. Y por gastos de actividad, 4.340 euros al mes por cada cinco parlamentarios o fracción.
Navarra Suma, que tiene 20 escaños, ingresa cada mes 79.438 €. Le sigue el PSN –50.951 €–, Geroa Bai –41.245 €–, EH Bildu –35.879 €–, Podemos –18.124 €– e I-E –.
Las recomendaciones del Tribunal de Cuentas y Comptos
Convenios. El Tribunal de Cuentas formuló la recomendación en su moción número 1445. En ese documento detalla que los informes de contabilidad ordinaria de los partidos demostraban que en 2016 el 72% de las subvenciones a los grupos parlamentarios, ya fueran en Cortes o en asambleas autonómicas, se transferían tal cual a los partidos políticos, que las utilizan para sufragar toda su actividad política, no solo la de su grupo parlamentario. Concretamente, ese dinero puede usarse, sin quebrar la ley de financiación de partidos políticos, para “gastos corrientes de funcionamiento, organización, personal y actividad del grupo”. En ese documento, el Tribunal de Cuentas ya recomienda: “Convendría que se suscribieran convenios entre unos [partidos políticos] y otros [grupos parlamentarios] en los que se determinaran los servicios que la formación política ha de prestar a los grupos, con una valoración económica de los mismos”. Comptos recoge esa recomendación y la hace suya. La plasma en el informe de fiscalización de cuentas del Parlamento en 2021 y recomienda la reforma.
La modificación que ha aprobado el Parlamento foral
El cambio introducido. En una de las últimas reuniones de Mesa y Junta, el Parlamento acordó lo siguiente tras contar con el informe de la jefa del Servicio de Intervención y Asuntos Económicos, revisado y con el visto bueno de Servicios Jurídicos. El Parlamento accede a modificar las “Normas sobre asignaciones económicas de los Grupos Parlamentarios, con objeto de actualizar la norma incluyendo las recomendaciones de la Cámara de Comptos y el Tribunal de Cuentas con respecto a las aportaciones de los grupos parlamentarios”. Así, se añade el siguiente párrafo: “Los Grupos Parlamentarios presentarán en el Servicio de Intervención y Asuntos Económicos, junto con las Cuentas Anuales, el Convenio de colaboración formalizado con los partidos políticos, en el que se recojan los servicios que las formaciones políticas prestan a los Grupos, con una valoración económica de los mismos”. Aprobado esto, se publicará en el Boletín Oficial del Parlamento de Navarra y en la web oficial. Su entrada en vigor queda fijada el día que se constituya la XI legislatura. Los grupos parlamentarios reciben, desde el 1 de enero de este año, un poco más de 241.000 € al mes entre todos.