En Bizkaia, hoy comienza el juicio contra la enfermera acusada de simular la vacunación de 400 niños en Kabiezes, en Santurtzi, a los que dejó sin inmunizar entre febrero de 2021 y septiembre de 2022. La Fiscalía reclama siete años y medio de prisión y otros tantos de inhabilitación.
El Ministerio Público sostiene que la acusada es la presunta autora de un delito continuado de daños a los niños por no administrarles los sueros previstos en el calendario vacunal. Además de comentarios en contra de los preparados, en el momento de poner las inyecciones lo hacía con movimientos rápidos y desechando las jeringas justo después, de forma que los padres no podían ver si había administrado correctamente las vacunas. Denunciaron y Osakidetza puso en marcha una investigación en la que los análisis serológicos indicaron que 404 niños del cupo de esta enfermera no tenían los anticuerpos previstos en el calendario vacunal.
La Fiscalía reclama siete años y medio de prisión y otros tantos de inhabilitación. También entiende que es responsable de un delito continuado de falsedad documental, ya que registraba las vacunas en la historia clínica de los menores pese a que no se las había inoculado. En el capítulo económico, en concepto de responsabilidad civil, reclama una indemnización de 26.763 euros para Osakidetza por el valor del material que desechó y que Salud tuvo que administrar después a los niños afectados, así como 5.382 euros por los gastos del personal que realizó esta labor y una multa de 18.240 euros para la inculpada.
La acusación particular, que ejercen las familias, piden 12 años de prisión porque también acusan a la enfermera de malversación y lesiones. La vista oral se prolongará hasta el viernes. Hoy lunes está previsto que declare la acusada. A lo largo de la semana también se escuchará a 69 testigos y 8 peritos. Entre ellos habrá progenitores de los niños afectados, personal de enfermería, especialistas en Medicina Preventiva y la exdirectora de Salud Pública.