Errejón rechaza llegar a un acuerdo con el vecino de Lavapiés que le acusa de calumnias

El líder de Más País, Íñigo Errejón, ha rechazado este martes llegar a un acuerdo con el vecino de Lavapiés --que le acusó de haberle propinado una patada la noche del 2 de mayo de 2021-- por la demanda de conciliación que presentó en su contra por la presunta comisión de un delito de calumnias e injurias, según han confirmado fuentes jurídicas a Europa Press.

Fue el pasado octubre cuando el vecino de Lavapiés presentó la demanda de conciliación en los Juzgados de Madrid por presuntos delitos de calumnia e injurias al considerar que Errejón atentó contra su honor al haberle acusado en varias intervenciones en medios de comunicación de formular una denuncia falsa y calificarle, en palabras del demandante, de "energúmeno de extrema derecha".

Errejón se ha negado a retractarse de estas declaraciones en el acto de conciliación que ha tenido lugar este martes en el Juzgado de Primera Instancia Número 1 de Madrid, donde estaba citado a las 09.30 horas por estos hechos.

En su escrito, el denunciante relataba que las manifestaciones de Errejón se habrían producido después de que la Audiencia Provincial de Madrid confirmase el pasado mes de septiembre la sentencia dictada por el Juzgado de Instrucción Número 16 de Madrid que absolvió al dirigente del delito leve de maltrato del que se le acusaba al no quedar "acreditado que propinase una patada".

Según apuntan fuentes jurídicas, el líder de Más País entiende que no debe satisfacer ninguna indemnización que pide la parte denunciante, de 25.000 euros, así como tampoco una retractación sobre los calificativos hacia el mismo.

Al acto de conciliación no se ha presentado personalmente Íñigo Errejón --al no estar obligado a hacerlo-- pero sí su abogado y procurador. Por contra, el hombre que denunció sí ha estado presente y, tras finalizar sin avenencia, fuentes jurídicas han confirmado que se dará inicio a las acciones judiciales que procedan.

El denunciante ya avanzó que, en caso de que Errejón no reconociera ni aceptara los términos demandados, formularía querella contra él por "delitos de calumnias e injurias".