Fue un partido insulso, sin chispa, sin la intensidad que debe caracterizar siempre un partido entre los dos eternos rivales. El derbi entre la Real Sociedad y Athletic se saldó con un par de ocasiones de la Real en el segundo tiempo, un disparo de Kubo y un remate de cabeza de Brais, y nada más.
Muy poco cuando un equipo se está jugando lo que se juega la Real en este tramo final de la competición. Menos hizo el Athletic, con la mente puesta en su eliminatoria europea, a pesar del varapalo sufrido en el encuentro de ida. En cualquier caso, el equipo de Ernesto Valverde se limitó a defender el cero a cero. No hubo noticias de sus delanteros.
Así las cosas, a la Real le supone un muy pobre botín el punto. Y eso que algunos resultados de rivales directos en su pelea por entrar en competición europea le beneficiaron. Pobre consuelo cuando el equipo sigue dando síntomas de cansancio, falta de ideas y muy poca amenaza como para ganar los partidos.
Por otra parte, era el primer partido tras anunciar Imanol Alguacil que no seguirá al frente de la plantilla la próxima temporada. Los que esperaban una reacción de los futbolistas pudieron apreciar que nada más lejos de la realidad. La vida sigue igual para la Real y esto no es bueno. De no mediar un cambio radical, el equipo txuri urdin está destinado a no cumplir el objetivo de la temporada.