Chenoa aconseja a los nuevos ‘triunfitos’: "Hasta el fracaso sirve"

Después de sus inicios formando un grupo musical con unos amigos y como cantante principal en el Casino de Palma de Mallorca, Chenoa (María Laura Corradini) se dio a conocer como participante en la primera edición de 'Operación Triunfo'. La vimos por primera vez en la primera gala del formato emitida el 22 de octubre de 2001, terminando como cuarta finalista hasta que en abril de 2022 sacó al mercado su primer disco.

Ahora, 22 años después, Chenoa volverá a pisar el plató del 'talent' musical aunque en esta ocasión como presentadora del programa, que ha dado el salto de la televisión en abierto al 'streaming' a través de Prime Video. Para la artista, en la actualidad también jurado de un formato de éxito como es Tu cara me suena, que próximamente estrenará nueva temporada, este reto va a suponer una forma de “cerrar el círculo”, afirma, volviendo al lugar que la llevó a la fama y recordando su etapa de concursante.

La cantante reconoce que sintió “taquicardia y el corazón saliendo del pecho” al pisar el plató donde se desarrollarán las galas del programa recordando su época de concursante. Preguntada por cómo afronta su nueva tarea como presentador del 'talent' musical que la dio a conocer al gran público, señala que “no quiero forzarme y voy a buscar el equilibrio para disfrutar y hacerlo como a mí me gusta”.

Disfrutar la ocasión

Operación Triunfo puede ser una gran plataforma de lanzamiento para un artista joven que trata de alcanzar un sueño haciéndose un hueco en el difícil mundo de la industria musical. Pero Chenoa aprovecha la ocasión para recordar que en este programa “no todo es ganar y hasta el fracaso sirve”, que los ganadores del concurso no son siempre los que más triunfan y que al final “el público va a decidir quién vale”. Y en este punto recuerda a la malagueña Lola Índigo, que fue la primera expulsada de la academia de OT en 2017 y que, hoy por hoy, ha desarrollado una carrera musical de éxito.

La experiencia es un grado y, por ello, Chenoa recomienda a los nuevos participantes “que no se pierdan nada. La academia es un centro de focalización brutal hacia lo que les gusta hacer y tienen que disfrutar todas las clases y galas”. 

También reconoce diferencias entre su edición y la nueva generación de concursantes porque “disponen de una cultura de la exposición y saben que se opina de ellos en las redes, y aunque no lo sepan controlar, sí que saben que existe”.

Recuerda que en OT hay “una parte pedagógica por parte del profesorado de la academia y un jurado que tiene una forma nueva y chula de decir las cosas, que trata de construir a pesar de que no te guste lo que te vayan a decir”.