Belgrado-Kaunas-Bilbao, el triángulo que esta semana calibra el futuro de Baskonia

Mucho hay en juego esta noche (20.30 horas) en el infernal Pionir de Belgrado. Para Partizán seguir aspirando al menos a estar en el play-in que puede conceder, con el nuevo formato, la presencia en los cuartos de final de esta Euroliga. A ellos puede acceder por vía directa el Baskonia en caso de culminar un extraordinario final de liga regular. El octavo puesto está al alcance, y el sexto, y hasta el cuarto, a dos partidos con cinco aún por jugar.

Se prevén fuertes emociones en la capital serbia entre dos equipos que ya dirimieron el choque de la primera vuelta por un simple detalle, aquel 84-83 que representó el enésimo regreso de Dusko Ivanovic a las huestes vitorianas tras cinco derrotas encadenadas bajo la batuta de Joan Peñarroya. Aquel es uno de los trece partidos que los balcánicos han cedido en sus viajes, habiendo sido capaces de ganar en Lyon, Kaunas y Valencia. Como locales es otra historia, ya que únicamente Barcelona, Bologna y Bayern han podido asaltar la caldera del ahora llamado Stark Arena. Por delante de esas veinte mil enfervorecidas gargantas pasa hoy Baskonia, y el jueves el Real Madrid.

Los azulgranas deberán echar el resto lejos de Gasteiz, ya que pasado mañana visita a Zalgiris -y el domingo, también por la tarde, aguarda Bilbao Basket en Miribilla, también de capital importancia para entrar en la lucha por el título de la Liga ACB- y posteriormente el WiZink Center y a la Virtus, mientras en Zurbano solo va a recibir a Efes. Lo de ser al menos octavo, con tres victorias de margen sobre el décimo, parece muy alcance de la mano. Pero también hay que mirar hacia abajo para evitar disgustos como el del curso pasado. El peligro que hace falta quitar del medio es el Maccabi, con el que a día de hoy apenas se le gana en el basket average. Recibe a Villeurbanne y el viernes juega en Múnich. Quien hace cuentas tiene claro que mínimo hay que llevarse dos de los cinco.

En los banquillos va a acontecer otro duelo de ilustres, Ivanovic versus Zeljko Obradovic, quien cuenta con figuras de la talla de Jaleen Smith, Andjusic, Avramovic, Caboclo, Nunnally y Punter, y es probable que cuente con la baja de Zach LeDay. El técnico montenegrino entiende como necesario no arrugarse para salir triunfal de una cancha que conoce como la palma de sus manos.

El reto tiene su complejidad porque "su público hace algo especial y es muy difícil jugar, o puede ser bueno porque puede ser una inspiración para jugar delante de este ambiente. Comienzan con euforia y muy agresivos, con buen acierto y su gente les apoya. Mis jugadores tienen que saber que ese ambiente puede ser un impulso, es clave", ha comentado Dusko.