BASKONIA | Semana de Euroliga para recuperar la autoestima y el terreno perdidos que comienza esta noche en Mónaco

Arranca la semana de dos partidos en Euroliga para un Baskonia que necesita volver a ponerse las pilas y mostrarse más solvente tras lo vivido ante Barcelona y Real Madrid. La visita de los blancos al Buesa Arena supuso certificar la decepcionante ausencia en la Copa del Rey, y toca pasar página. Antes de que llegue Olympiacos el viernes, esta noche (19 horas) se busca dar un golpe de timón ante el Mónaco y en su pista, la Salle Gaston Mèdècin.

El cuadro monegasco es uno de tantos rivales directos por acceder dentro de tres meses al Top8, o, en su defecto, a las plazas novena y décima de repesca que en el formato se ha innovado para esta edición. Y su base norteamericano y viejo conocido de la parroquia baskonista, Mike James, vuelve a constituirse en la principal amenaza para la escuadra de Dusko Ivanovic, que perdiera ante el equipo del Principado en Zurbano, y en los últimos segundos, 75-77, durante una primera vuelta que ya tocó a su fin.

El peculiar director de juego natural de Portland está firmando unos registros estratosféricos en la máxima competición durante esta campaña. Ha anotado más de diez puntos en los 19 partidos jugados hasta ahora, hace 19.6 por partido además de propinar 5.2 asistencias y llevarse 23.1 créditos de valoración.

James estará respaldado por otros elementos a tener muy en cuenta, como Brown, Cornelie, Hall, Jaiteh, Motiejunas y Strazel, si bien Sasa Obradovic afronta el choque con dos significativas bajas, las del norteamericano Lloyd y el francés Okobo. En cualquier caso, todo va a hacer falta, tirando de su habitual carácter para recuperarse del mazazo copero, en la versión vitoriana para sumar el que sería el undécimo triunfo de esta liga regular. De este modo se igualarían los alcanzados por un Olympiacos que, antes de arribar a la Green Capital, recibe mañana en el Pireo al Barça. Con el viaje en ACB a Manresa en lontananza para cerrarla, semana muy importante en Europa a todos los niveles. Está claro.