Esta medianoche ha finalizado el estado de alarma que ha estado vigente desde marzo del año pasado, catorce meses han pasado desde que el Gobierno acordó la medida para contener la pandemia y poner freno a la covid-19 y que ha supuesto para la ciudadanía fuertes limitaciones en el día a día.
La primera noche sin estado de alarma y toque de queda en todo el Estado ha provocado múltiples aglomeraciones. En Madrid una multitudinaria celebración de miles de jóvenes bebiendo y bailando en las calles y plazas más céntricas de la capital han festejado de modo anticipado San Isidro, el día 15, patrón de los madrileños.
Plazas como la de Chueca y Malasaña o la Puerta del Sol han sido tomadas por miles de jóvenes, que no guardaban las distancias entre personas, que no han acatado el toque de queda que regía este sábado hasta las 23.00 horas y, por tanto podían ser multados, y han seguido de fiesta hasta mucho después del estado de alarma, que ha vencido a las doce de la noche.
En la calle de Velarde, en el popular barrio de Malasaña, han volado latas y botellas contra dos vehículos patrulla de la Policía Local que ha dispersado una aglomeración de jóvenes y que les ha obligado a huir hacia la cercana Plaza Dos de Mayo, ya atestada de gente consumiendo alcohol.
En la Puerta del Sol, la Policía Local ha desalojado el "kilómetro cero" en torno a las 23.30 horas ante la concentración de la gente, que se ha quedado en las calles aledañas esperando a que el icónico reloj marcara las doce de la noche y decayese el estado de alarma.
Acordonada por los agentes, los jóvenes no han cesado de gritar la palabra "libertad", "alcohol" y el estribillo de la canción Seven Nation Army (que cantan los seguidores del Real Madrid en las victorias) y segundos antes de las doce han empezado a corear una cuenta atrás que ha acabado con una carrera hacia el centro de Sol.
Barcelona
medio millar de personasse han reunido en la madrugadaEsta ha sido una de las principales aglomeraciones que se han registrado en la capital catalana una vez que ha decaído el estado de alarma y con él el toque de queda que en Catalunya estaba fijado a partir de las 22.00 horas.
Otros puntos en los que se han juntado decenas de personas han sido la plaza de los Ángeles, el paseo del Born, plazas como la de Gracia y la de la Revolución o diversas playas de la ciudad.
Con la restauración cerrada desde las 17.00 horas y el toque de queda a partir de las 22.00 horas, en Barcelona se han escuchado esta noche más fiestas en pisos particulares de lo habitual en las últimas fechas. La medianoche se ha recibido con petardos y gritos de alegría, y a partir de entonces por la calles de la ciudad han empezado a circular barceloneses y turistas dispuestos a reencontrarse con la noche.
Control policial
La Guardia Urbana ha desplegado a 260 agentes, un 30 % másEl amplio dispositivo policial no ha impedido, sin embargo, que medio millar de personas se reunieran bajo el Arco de Triunfo, bailando y sin mantener las distancias mientras se entonaban consignas como "libertad". Diversas furgonetas policiales han desalojado finalmente el paseo, si bien los jóvenes reunidos, una parte de ellos turistas, se han dispersado entonces por las calles aledañas.
Con todo, muchos barceloneses han optado por despedir el estado de alarma con fiestas en pisos particulares, puesto que por primera vez en meses no había que mirar el reloj para volver a casa cumpliendo con la normativa.
Desde poco después de las 22.00 horas, cuando ha comenzado un toque de queda que ha terminadp solamente dos horas más tarde, las fuerzas del orden han peinado las playas con el fin de evitar reuniones de más de seis personas. A partir de este domingo, Catalunya da un salto importante en la relajación de las restricciones contra la covid-19, dado que llega a su fin el cierre perimetral de la comunidad y el toque de queda nocturno.
Con el aval del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), el Govern mantiene la limitación de 6 personas en encuentros sociales, en interiores y exteriores, a menos de que se trate de convivientes. Una de las principales novedades es que se amplía el horario de la restauración para poder volver a servir cenas, de manera que bares y restaurantes pueden estar abiertos desde este domingo hasta las 23.00 horas.