El Tribunal Superior de Justicia dio la razón ayer a la Liga, que pretendía un aumento del aforo en los campos de los equipos vascos del 30% al 60%, al igual que en el resto de los recintos de Primera División; después, el Gobierno Vasco anunció que no recurrirá por lo que la Real tendrá el apoyo de 23.700 aficionados el domingo contra el Sevilla, es decir el 60% del aforo del campo. De esta forma, todos aquellos que quieran asistir tienen ahora muchas más opciones que en encuentros anteriores al doblarse el aforo.

Ayer se confirmaron casi 22.300 solicitudes de entradas para asistir a Anoeta el domingo, sin duda un partido muy atractivo en el horizonte próximo, por lo que teniendo en cuenta que aun queda tiempo tiene pinta de que habrá que realizar un nuevo sorteo, aunque esta vez serán menos los que se queden fuera.

Como siempre, nunca llueve a gusto de todos, pero es cierto que la mayoría ha acogido esta resolución con alegría por lo que permite acudir al Reale Arena a buena parte de los socios. Está claro que el agravio comparativo con respecto a otros clubs era evidente y que la pandemia parece haber aflojado lo suficiente como para permitir una reunión de más personas, en este caso el doble, en un recinto al aire libre y tan grande como un campo de fútbol.