20 años después, de nuevo en la vecina Francia

Jokin Aperribay ha sido tajante en las horas previas del choque que esta noche (21 horas, 20.30 en ONDA VASCA con la retransmisión de Samu Valcarce desde la capital francesa) va a abrir en el Parque de los Príncipes la eliminatoria de octavos de final de la más prestigiosa competición del continente por clubes. "Estamos en la Champions para intentar ganarla", y otros mensajes, como el de Hamari Traoré, encantado por el emparejamiento desde que salió en diciembre, conducen antes de jugar al convencimiento de que, aún estando delante el temible PSG, esta vez, y a diferencia de hace veinte años, sí. Este talante puede siginificar el primer paso que conduzca a que la Real Sociedad pueda alcanzar los cuartos de final.

Que va ser dífícil, muy difícil. A nadie se le escapa. Que el equipo francés anda mejor y el donostiarra peor que cuando el bombo dictó sentencia, también es una evidencia. Baste comprobar los cuatro partidos que dejan a las claras la galopante sequía goleadora que asedia a un conjunto cuyo entrenador, Imanol Alguacil, entiende que necesita de Oyarzabal para revertir la situación. El capitán lleva varias citas ausente, y ya recuperado, aunque falto de ritmo, será desde el inicio "Mikel y diez más".

Porque por mucho que estén disponibles el estrellado Umar Sadiq y el indolente André Silva, es preferible que el eibartarra actúe de 9 ante las ausencias de Sheraldo Becker y Carlos Fernández. Son dos de las seis bajas acumuladas para este primer asalto, junto a Aihen Muñoz, Kieran Tierney y Álvaro Odriozola. Todos defensas, lo mismo que Aritz Elustondo, sancionado tras ver la tercera amarilla ante el Inter en Milán.

En esto se parte en desventaja, pues Luis Enrique ha de prescindir de solo tres elementos por causa de fuerza mayor, los casos de Kipkembe, Nuno Mendes y Skriniar en un bloque destinado un año más, talonario en mano, para brillar con luz propia, en la Liga de Campeones y, a poder ser, ganarla. No parece en todo caso, aunque quién sabe, que sea el momento más propicio, sin Messi ni Neymar.

Sin opción en Lyon

Veinte años. Dos décadas completas. Porque fue a finales de febrero y comienzos de marzo de 2004 cuando aquella deslumbrante Real de Reynald Denoueix y subcampeona de Liga se plantó más allá de la fase de grupos y se cruzó en octavos con el Olympique de Lyon. Como segunda de grupo, tuvo que conformarse con afrontar el choque de ida en Anoeta, y ya todo comenzó torcido. Un autogol de Gabi Schürrer fue el principio del fin, que tuvo su confirmación dos semanas más tarde en Gerland con otro 1-0 adverso, obra de Juninho Pernambucano. Los lioneses irían a parar con sus huesos en el suelo en siguiente ronda ante el Oporto, a la postre campeón de aquella edición. Esta vez se invierten los factores, queda por ver el resultado.

Diez años después se pudo quitar a orillas del Ródano aquella espina clavada con un 0-2 ante 6.000 aficionados desplazados, y ahora, de nuevo en el país vecino, se cuenta con el factor campo a favor, y con el respaldo a 800 kilómetros de casa de dos millares de seguidores para decantar una eliminatoria que se resolverá el martes 5 de marzo al calor de toda la afición gracias al esfuerzo realizado hasta el último segundo de los seis partidos previos por acabar primero de grupo. El desafío es mayúsculo, pero quién dijo miedo ante este 'ochomil' como ha parafraseado el director de fútbol realista, Roberto Olabe.

Con arbitraje a cargo del italiano Marco Guida, ambos técnicos, que se han deshecho mutuamente en elogios, perfilan los siguientes onces: el de Orio, Remiro; Traoré, Zubeldia, Le Normand, Javi Galán; Zubimendi, Brais, Merino; Kubo, Oyarzabal y Barrenetxea; y por parte del asturiano exseleccionador español, Donnarumma; Achraf, Marquinhos, Beraldo, Lucas Hernandez; Zaire-Emery, Fabián Ruiz, Vitinha; Dembélé, Mbappé y Barcola.

Estos octavos arrancaron anoche con la lógica impuesta por el Manchester City en Copenhague (1-3) y el Real Madrid, no exento de polémica, en Leipzig (0-1). Hoy también se juega en Roma el Lazio-Bayern de Múnich, y la semana que viene llegará la segunda tanda, con los duelos Inter-Atlético de Madrid, PSV Eindhoven-Borussia de Dortmund, Nápoles-Barcelona y Oporto-Arsenal.