Si tu inquilino deja de pagar la luz, ¿quién es el responsable de la deuda?

Los alquileres de viviendas pueden convertirse en objeto de conflicto si las condiciones no están perfectamente recogidas en el contrato. Cuando se produce, por ejemplo, un impago en la factura de la luz, cuyo precio está ahora por las nubes, es importante tener claro quién es el responsable de la deuda.

Puede ocurrir que se haya acordado previamente que el arrendador siga siendo el titular del suministro de luz y el responsable de pagar las facturas o, por el contrario, que se haya decidido poner la luz a nombre del inquilino.

Expertos abogan por esta segunda opción, ya que beneficiará tanto al arrendador como al arrendatario. Mientras que el propietario se despreocupará del pago de las facturas, el inquilino podrá elegir la tarifa y la compañía que más le convienen.

Un hombre compara recibos de la luz. Freepik

Desde la compañía Gana Energía nos ofrecen algunas claves para saber si el inquilino paga la luz y qué se debe hacer cuando deja de hacerlo según los diferentes supuestos:

- Si el titular de la luz es el inquilino. Para el propietario es difícil saber si el arrendatario paga la luz, pero puede solicitar una Nota Simple del inmueble en el Registro de la Propiedad de la provincia donde está la vivienda. En ella se pueden consultar las cargas de la vivienda, incluidas las deudas que tenga el inquilino. Si la compañía decide cortar la luz, esto no tiene por qué suponer un problema para el propietario, ya que no es el responsable de las deudas ni del corte del suministro en ningún caso.

- Si el titular de la luz es el propietario. Si el arrendador decide mantener los suministros a su nombre, será el responsable de los problemas e impagos que puedan suceder.

- Si el inquilino deja facturas de luz sin pagar. Si en su día se hizo el cambio de titular del suministro, esto no supondría ningún problema para el propietario, ya que el responsable de la deuda será el inquilino y él será quien tenga que pagarla. Si en el peor de los casos se corta el suministro, la solución más rápida para que el arrendador pueda volver a alquilar la vivienda es que el propietario pague la deuda y la reclame vía judicial al inquilino. Otra opción es pedir un nuevo alta del servicio en la misma compañía, asumiendo los costes que esto puede suponer, o contratar el suministro a través de otra compañía, esta vez siendo titular el propietario.

Vista exterior de una casa con su interior iluminado. Freepik

¿Se puede cortar la luz a un alquilado?

Cuando el inquilino no paga los suministros, el propietario puede llegar a plantearse cortarle la luz o dejar de pagar las facturas. Sin embargo, es recomendable informarse antes de hacerlo, ya que esto puede causarle problemas al arrendador si no se cumplen ciertas condiciones.

De hacerlo, el inquilino podría denunciarle al considerar que la vivienda es inhabitable o alegar coacciones para desalojar el inmueble por la vía rápida.

Por ello, cuando el inquilino no paga los suministros, la única opción que tiene el propietario es interponer una demanda de desahucio por impagos.

Ante cualquier problema que pueda surgir, es recomendable que consultes con tu comercializadora de la luz para que puedan asesorarte acerca de cuál es para ti la mejor opción.