Qué es el consumo fantasma de electricidad y cómo afecta a la factura de la luz

Con la escalada de precios que está sufriendo la tarifa de la luz, donde el kilovatio hora bate récords día tras día, cualquier fórmula que nos permita ahorrar en la factura de la luz para no llevarnos sustos es bienvenida, y es que todos tenemos hábitos en casa que, sin saberlo, contribuyen a que el contador aumente más de lo que nos gustaría.

Además de procurar bajar nuestro consumo de electricidad renovando bombillas y electrodomésticos por otros con bajo consumo, aprovechando bien las horas de luz y apagando las luces de las estancias que hemos abandonado, también podemos reducir el conocido como consumo fantasma, muy arraigado entre nosotros y que generamos casi sin darnos cuenta.

Nuestras casas están repletas de electrodomésticos y aparatos conectados a la red eléctrica que utilizamos con cotidianidad, pero hay muchos otros que dejan de usarse cada cierto tiempo. Son esos los que producen un consumo fantasma o en stand-by, un derroche silencioso… Existen varias formas de llamarlo, pero en cualquiera de ellas se trata de electricidad que estás consumiendo y pagando sin necesitarla.

Un aparato DVD en 'standby', provocando un consumo fantasma o un derroche silencioso en la factura de la luz. Freepik

Qué es el consumo fantasma

El consumo fantasma es el gasto que realizan los aparatos electrónicos conectados permanentemente a la red, incluso cuando no están en uso. Dicho de otra manera, sería el consumo de los electrodomésticos y otros aparatos cuando se mantienen en modo de espera o stand-by y consumen cantidades significativas de energía, entre 1 y 30 vatios por hora.

Los cargadores que permanecen enchufados cuando las baterías ya están completas causan derroche, el televisor que muestra una luz roja -síntoma de que está apagada- también consume energía, el microondas, siempre dispuesto a calentarnos cualquier cosa...

Es cierto que el consumo de esos dispositivos en modo de espera suele ser pequeño, pero el problema radica en que solemos tener muchos enchufados y al final acaban repercutiendo en un consumo importante de electricidad.

Es complicado estimar el coste en tu factura del consumo fantasma, ya que el precio del kWh depende de tu tarifa eléctrica y del precio diario de la electricidad en el mercado, pero podemos calculando medias en la realidad del mercado, actualmente podríamos ahorrarnos hasta 95 euros al año.

Qué aparatos consumen más

Estimar el consumo en stand-by, depende en gran medida del modelo de electrodoméstico o aparato utilizado y su eficiencia energética. No obstante, hay algunos aparatos que claramente consumen más que otros y que convendría apagar del todo siempre que no los estés utilizando.

• Decodificadores TV. Es uno de los aparatos que más consumen en stand-by, particularmente si cuentan con un sistema de grabación mediante disco duro. Pueden llegar a consumir entre 41 y 64 kWh al año.
• Cargador del móvil. Hay quien cree que los cargadores móviles siguen gastando de forma notable incluso cuando no lo tenemos enchufado al móvil. Pero este mito es falso, y el consumo fantasma de estos cargadores es insignificante. Hay otros aparatos que sí tienen un consumo fantasma elevado, pero los cargadores móviles no están entre ellos.
• El ordenador portátil. Es uno de los aparatos que con más frecuencia dejamos enchufado. Un portátil absolutamente apagado consume, por el mero hecho de seguir enchufado, alrededor de 35 kWh al año.
• La minicadena. Con los equipos de música pasa algo similar a lo que sucede con el ordenador portátil. El consumo ronda los 53 kWh.
• La televisión. Es un clásico tener la tele en stand-by durante toda su vida útil. Un monitor CTR de 32 pulgadas llega a gastar en stand-by unos 53kWh anuales, mientras que un monitor LED de 37 pulgadas reduce este consumo a 18 kWh anuales.
• El microondas. Este electrodoméstico tiene un consumo fantasma que alcanza los 35 kWh al año. Por eso tienes que tener mucho ojo para dejarlo apagado cuando no lo estés utilizando.