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Más del 85% de los jóvenes vasconavarros que trabajan fuera quieren volver a casa, y no solo por Navidad

Según un informe sobre la juventud vasca y navarra en la diáspora, elaborado por Artizarra Fundazioa, cerca de 42.000 personas de entre 25 y 40 años residen en la diáspora y la mayoría reclama políticas activas para favorecer su regreso
Dos trabajadores miran un plano. / Freepik

Una parte del talento joven de Euskadi y Navarra se ha visto obligada en los últimos años a migrar y labrarse un futuro lejos de los territorios en los que creció vital, social y académicamente, para encontrar unas oportunidades que el hogar no siempre brinda.

Ahora, según un informe sobre la juventud vasca y navarra en la diáspora, elaborado por Artizarra Fundazioa y Deusto Business School, más del 85% de esos jóvenes que trabajan fuera de su territorio considera la posibilidad de regresar a su lugar de origen para su desarrollo profesional, lo que supondría la recuperación de unos 35.700 perfiles profesionales de alta cualificación para estas comunidades autónomas.

Los cerca de 30.000 jóvenes vascos y 12.000 navarros, de entre 25 y 40 años, que trabajan fuera de su territorio de origen, conforman al fin y al cabo una diáspora joven amplia, diversa y con un componente de capital humano cualificado.

El objetivo del estudio, señalan, es conocer por qué se han marchado, qué reclaman para volver y con todo ello además impulsar herramientas y el diseño de “políticas activas e iniciativas sociales que promuevan y favorezcan el retorno de este talento joven”, según han explicado Jon Ander de las Fuentes, miembro de Artizarra, y Guillermo Dorronsoro, profesor en Deusto Business School.

Estancia prolongada

Por perfiles, los jóvenes que conforman esta diáspora tienen estudios de grado, especialmente de máster y doctorado, en gestión empresarial, ingenierías y disciplinas STEM. Su estancia en el exterior es además prolongada. Y es que, el 60% lleva más de seis años fuera de su lugar de origen, y entre los motivos de su salida predominan el empleo y desarrollo profesional, y la búsqueda de mejores salarios y proyección profesional como factores claves.

Por contra, entre lo que les frena para volver a casa una de las razones principales es la “falta de oportunidades laborales y proyectos de interés, de reconocimiento profesional”, así como el problema de acceso a la vivienda en estos territorios, según se desprende del informe.

Arraigo

“En Artizarra creemos firmemente que el arraigo es una ventaja competitiva para cualquier territorio y para nosotros se compone de tres pilares: arraigo empresarial, de capital y de talento. Por ello, consideramos fundamental trabajar por arraigar el talento y también por recuperar el que está en la diáspora vasca y navarra”, ha señalado en ese sentido Jon Ander de las Fuentes.

Para hacer frente al envejecimiento y a la fuga de capital humano, al fin y al cabo, varios países y regiones europeas han puesto en marcha “políticas activas para atraer talento, combinando incentivos fiscales, oportunidades laborales, oferta residencial y programas de arraigo”.

Ese es el escenario al que se enfrentan ahora mismo Euskadi y Navarra, que “deben establecer dinámicas urgentes que frenen la emigración de talento joven y generen condiciones para el retorno”, así como el fortalecimiento de una diáspora activa, conectada y comprometida con el arraigo al territorio. “No hay ninguna inversión más rentable para Euskadi y Navarra que la de que dediquemos a crear las condiciones que permitan el retorno de nuestra diáspora o, al menos, a mantener el vínculo con estas personas”, concluye en ese sentido Guillermo Dorronsoro.

16/12/2025