La Policía Local de Barakaldo frustra la ocupación de una vivienda unifamiliar

La Policía Local de Barakaldo ha evitado la ocupación de una vivienda unifamiliar vacía situada en la zona de Basatxu y ha detenido por este motivo, a un hombre acusado por un delito de usurpación, según ha confirmado el área de Seguridad Ciudadana y Protección Civil de la localidad fabril. 

El hombre huyó a la carrera entre zarzas

La actuación se produjo en la tarde-noche del martes. Varias patrullas de la Policía Local fueron requeridas para acudir a una casa cuyos accesos estaban siendo forzados. A pesar de la poca luz que había en la zona, los agentes localizaron a tres mujeres en el interior de la vivienda unifamiliar y vieron cómo un hombre huía precipitadamente entre unas zarzas cercanas.

La casa no tenía signos de estar habitada y las mujeres reconocieron que acababan de entrar en ella. Los agentes se incautaron además de varios objetos que podrían haber sido utilizados para intentar acceder a la vivienda: un gato de coche y una barra de uña, así como de una sierra de corte circular.

Finalmente, en el exterior de la finca la Ertzaintza consiguió localizar y arrestar al hombre huido, que reconoció haber forzado la verja protectora de la vivienda, así como la puerta de acceso a la misma, que se encontraban dañadas. 

Importancia de los avisos tempranos para evitar ocupaciones

El concejal de Seguridad Ciudadana, Ángel Madrazo recuerda la importancia de avisar "con rapidez" a la Policía Local para evitar que se consumen las ocupaciones de viviendas. "En el caso de Basatxu, los ocupantes ni siquiera han llegado a asentarse en el inmueble", se felicita. 

Arrestado delincuente con 13 órdenes de detención 

Por otro lado, la Policía Local arrestó anteayer a otro hombre que contaba con 13 órdenes de detención del Juzgado por diversas causas abiertas contra él. El joven estaba siendo buscado por los agentes después de que en días anteriores, durante una intervención policial, se diera a la fuga.

La detención del hombre se produjo al reconocerle unos policías paseando por una céntrica calle de Barakaldo.