Ewa Murillo y Aratz Castro, coordinador de Bilbao Bizkaia HARRO, han abierto la sección CON ORGULLO con un mensaje de esperanza y firmeza, con motivo del Día Internacional para la Erradicación del VIH. Han puesto el acento en la esperanza que ha traído la ciencia, subrayando que con el tratamiento actual, la vida de las personas con VIH es plena y normal.
En el plano informativo, han reportado que Euskadi ha mantenido una cifra estable de nuevos diagnósticos, en torno a los 125 casos anuales, lo que ha significado un control efectivo. Castro ha destacado que la mayoría de los pacientes en la comunidad ha logrado una carga viral indetectable, lo que implica la intransmisibilidad del virus.
Han desgranado la diferencia histórica entre VIH y SIDA, explicando que este último ha sido la fase avanzada que solo aparece por una detección tardía. También han recordado el punto de inflexión de 1996, cuando los tratamientos combinados transformaron la infección en una condición crónica.
Para finalizar, han hecho un llamamiento a la detección precoz, insistiendo en que se trata de un acto de autocuidado, y han desmentido el bulo de que el VIH sea una enfermedad ligada a la orientación sexual, un estigma que ha perjudicado la prevención en la población heterosexual.