Economía

La apuesta vasca por la eólica flotante con base de hormigón sigue adelante en Bilbao

Plataforma flotante de Saitec en el Puerto de Bilbao.

La generación de electricidad por vía eólica es el futuro en el proceso de transición energética para avanzar en la descarbonización y aunque Euskadi es uno de los líderes internacionales en renovables le falta dar un paso más en la eólica marina no anclada al lecho marino. Y es en esta área tecnológica donde la ingeniería vasca Saitec está desarrollando ya un prototipo de plataforma eólica flotante en avanzada fase de construcción en el Puerto de Bilbao y que, según lo previsto, servirá de base para un aerogenerador de 2 mw que estará operativo en el verano de 2022 en aguas de Armintza, en la plataforma de experimentación vasca Bimep.

Como se recordará el dispositivo, denominado, DemoSATH fue presentado el pasado verano en la citada localidad vizcaina de Armintza, y está íntegramente fabricado con tecnología desarrollada por la ingeniería vasca Saitec en colaboración con la compañía eléctrica RWE.

La eólica flotante es clave para países como Euskadi que tienen una mínima plataforma continental y no puede instalar molinos de viento en el lecho marino como en el Báltico por la gran profundidad de las aguas.

La propuesta es pionera porque mientras la mayoría de las plataformas offshore actuales existentes en el mundo están hechas en acero, está será en hormigón, un material más barato y más fácil de construir in situ.

De hecho, el primer aerogenerador eólico flotante vasco ya tiene la plataforma de hormigón en avanzada fase de construcción de la mano de Ferrovial.

Ayer lunes, responsables de las empresas involucradas, de la Autoridad Portuaria de Bilbao, del EVE y del Gobierno vasco presentaron en los muelles del puerto vasco el proyecto en su actual fase de construcción.

Se espera que las obras se completen en la primavera de 2022 y, una vez que se ponga en el agua, la turbina eólica flotante será remolcada y anclada en las instalaciones de Bimep en Armintza.

Según señalaron Javier Zarraonandia, viceconsejero vasco de Industria; Iñigo Ansola, director del EVE, y Javier Urgoiti, director de Saitec, el objetivo de este dispositivo, anclado en las instalaciones de Bimep, es probar durante dos años en condiciones reales del mar un prototipo flotante de 30 metros de ancho y 67 metros de largo.

09/06/2021