Los ciudadanos de Gasteiz están de enhorabuena, pues podrán disponer nuevamente de los servicios de escalada en los rocódromos municipales. Tras semanas de paralización de la actividad, que afectó profundamente a los usuarios habituales, los trabajadores de estas instalaciones han anunciado el cese de su huelga indefinida. La decisión de volver al trabajo, difundida este martes en un comunicado, se produce como resultado de la apertura de un cauce de comunicación efectivo entre la plantilla, la empresa concesionaria Prisma Global y el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz. Las trabajadoras han enfatizado que la prioridad de esta reanudación es dar un buen servicio a los usuarios".
Denuncias de precariedad
El conflicto laboral que ha mantenido inoperativos los rocódromos, administrados por Prisma Global, se remonta a una profunda insatisfacción con las condiciones de trabajo, marcadas por lo que la plantilla describe como años de precariedad. La movilización, que se intensificó con la convocatoria de un paro indefinido el pasado 8 de noviembre, buscaba exponer graves irregularidades en la gestión del servicio. La huelga, que se inició diez días antes del anuncio de la suspensión, se convocó para denunciar una serie de problemas estructurales.
Entre las demandas centrales figuraban la denuncia de impagos pendientes, la ausencia de formación adecuada para el personal y serias carencias en los protocolos de seguridad laboral. Los empleados aseguraron que la protesta era la única manera "efectiva" para visibilizar su situación y forzar la negociación.
Una reunión clave
La jornada decisiva se vivió este martes, cuando los trabajadores se manifestaron por la mañana frente al Ayuntamiento de Gasteiz para reforzar su protesta y mantener visible la huelga. Horas después, los trabajadores anunciaban la vuelta a la actividad dado que se había logrado establecer un diálogo considerado "fructífero" con las entidades responsables. En un gesto que busca restaurar la estabilidad laboral, tanto la contratista Prisma Global como la administración local de Vitoria-Gasteiz se han comprometido de manera formal a regularizar la situación contractual y económica de la plantilla. Este compromiso incluye la garantía de que se cumplirán todas las obligaciones laborales que hasta ahora se encontraban pendientes. La suspensión de la huelga se hizo "a raíz del diálogo" que consiguieron entablar.
"La lucha no cesa"
A pesar de la satisfacción por haber logrado desbloquear la negociación y obtener compromisos por escrito, la plantilla mantiene una postura cautelosa. Las trabajadoras han reconocido públicamente que, si bien se han logrado avances sustanciales, algunos de los objetivos originales de la huelga han sido satisfechos solo de forma "parcial". Por ello, advierten que "la lucha no cesa". El fin del paro indefinido marca el inicio de un proceso de verificación, durante el cual los empleados se mantendrán "unidas, organizadas y alerta" para asegurar que las propuestas trasladadas por la empresa y el consistorio se materialicen de forma efectiva y completa. La plantilla subraya la necesidad de seguir vigilantes para que los compromisos adquiridos se cumplan y para garantizar unas condiciones laborales dignas en un servicio que arrastra un historial de inestabilidad.
Finalmente, en su comunicado, el colectivo quiso expresar su profunda gratitud hacia la ciudadanía de Vitoria-Gasteiz por el apoyo recibido durante las semanas de movilización, un respaldo que fue crucial para mantener la presión. También agradecieron la activa implicación de organizaciones de apoyo como ESK y la Red de Autodefensa Laboral, quienes respaldaron públicamente sus reivindicaciones. La suspensión de la huelga permitirá a la plantilla retomar la actividad, pero deja claro que su compromiso de vigilancia ante el cumplimiento de los acuerdos es inquebrantable.