Sorpresa en Donostia. El alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, deja su cargo de primer edil, cargo que ostenta desde 2015 cuando fue elegido por primera vez. A primera hora, el propio Gabinete de Comunicación de Alcaldía anunciaba una comparecencia urgente a las 11.00 horas en el Salón de Plenos del Ayuntamiento para explicar las razones de esta decisión inesperada y que supone que Eneko Goia no culminará el actual mandato como regidor donostiarra que expira en mayo de 2027 con las elecciones municipales. Será el próximo 16 de octubre cuando presente su renuncia a la Alcaldía tras diez años al frente del Consistorio donostiarra.
Fin de ciclo
"Tenía muy claro que la Alcaldía era un ciclo que debía tener un principio y un final y siempre estuvo en mi mente el límite de diez años", ha manifestado. Además, el regidor donostiarra ha considerado que es "un buen momento" para tomar esta decisión y se ha mostrado convencido de que en el PNV hay "cantera suficiente" para que alguien "tome el relevo".
Acompañado de los ediles del PNV, Goia ha explicado las razones de su decisión y ha asegurado que lo tenía decidido desde "hace ya mucho tiempo" porque, según ha dicho, "creo que es bueno que existan ciclos con un principio y con un final". "Creo que es bueno saber hacer un buen relevo y saber hacerlo de forma ordenada", ha añadido.
"Tenía muy claro que la Alcaldía era un ciclo que debía tener un principio y un final y siempre estuvo en mi mente el límite de diez años", ha remarcado, al tiempo que ha destacado que "el proyecto político se ha conseguido".
De este modo, Goia ha incidido en que "siempre se pueden encontrar razones para seguir", pero ha considerado que "la inercia es una fuerza muy peligrosa". En su opinión, "lo importante es el proyecto de ciudad, y no tengo ninguna duda de que eso está en muy buenas manos porque hay equipo, muy buen equipo, para que PNV siga liderando esta ciudad".
El regidor donostiarra ha considerado en que "los retos y apuestas de la ciudad están bien dibujados y están en buenas manos" y ha resaltado que "son retos y apuestas que, esté donde esté, seguiré apoyando e impulsando porque lo que nunca dejaré de ser es donostiarra hasta la médula".
En esa línea, ha reiterado que "tiene que haber ciclos, que uno se tiene que poner límites, personales también, pero políticos también". "No pasa nada, aquí de lo que va es de proyectos, y el proyecto está bien blindado, y por eso estoy muy tranquilo. Lo demás, corres el riesgo de caer en una inercia que nunca acaba, y de confundir la persona con la ciudad, y yo creo que eso no es bueno", ha expresado.
Proyectos
Goia ha asegurado que se va "satisfecho" aunque "las cosas no han sido muchas veces fáciles" porque, según ha recordado, "hemos hecho apuestas por proyectos que nos han dado muchos quebraderos de cabeza". "Yo creo que en política se está para apostar y asumir las consecuencias de las decisiones que se toman si estás convencido de qué es lo que hay que hacer".
En ese sentido, ha manifestado sentirse "particularmente orgulloso" del proyecto del Topo. "Hemos sufrido, los ciudadanos también, con una obra que ha sido mucho más larga de lo que hubiéramos deseado, con afecciones, y evidentemente eso también me hace sufrir a mí, pero creo que esa es una apuesta absolutamente imprescindible para la ciudad, para colocar a la ciudad en una posición que permita que avance", ha destacado.
"Hay que estar permanentemente corriendo, porque los demás corren, y si tú no corres, no te quedas en el mismo sitio, te quedas atrás. Creo que son apuestas que hay que hacer como ciudad y esa es una que yo he visto siempre muy clara", ha afirmado.
También ha citado la estación del tren de alta velocidad, y ha resaltado que "por esa hemos peleado, y mucho, porque el planteamiento inicial que había de esa estación era muy inadecuada, y hemos conseguido que se esté ejecutando". Asimismo, se ha referido a la remodelación del estadio de Anoeta o la mejora de Txomin Enea y de la zona inundable del río Urumea en Martutene.
No obstante, ha señalado que quedan "muchísimas cosas pendientes" como el proyecto de los cuarteles de Loiola, "una vieja aspiración de este Ayuntamiento, por unanimidad, desde hace muchos años, que ha costado muchísimo, que nos ha dado muchos desvelos, pero cuando llegas a firmar las escrituras, pues me quedo con decir, misión cumplida".
Tras asegurar que se queda con la tranquilidad de "saber que las cosas que quedan por cerrar quedan en muy buenas manos", ha recalcado que "no voy a desaparecer del mapa, no me voy a Marte y, si se requiere mi ayuda, sigo pensando igual, sigo creyendo lo mismo, sigo defendiendo el mismo proyecto y estaré para arrimar el hombro donde se me necesite".
¿Quién le sustituirá?
Respecto a la persona que le sucederá en el cargo, ha afirmado que "esa no es una cuestión que me corresponde a mí". "Yo he sido candidato del PNV a la Alcaldía de San Sebastián, he anunciado que pongo fin a este ciclo y la decisión de quién deba ser a partir de ahora alcalde de San Sebastián corresponde al partido al que pertenezco", ha aseverado.
Su sustituto o sustituta deberá salir de los concejales actuales. Será, ha dicho, el partido quien decida. Todo apunta a que será el actual teniente de alcalde y concejal de Cultura, Deporte y Turismo, Jon Insausti.
Eneko Goia llegó a la Alcaldía de la capital guipuzcoana después de que el PNV ganara las elecciones municipales de 2015 y la firma de un pacto de Gobierno con el PSE-EE.
Desde entonces ha sido reelegido como primer edil donostiarra en las elecciones municipales de 2019 y 2023, continuando con el pacto de gobierno con los socialistas en el Ayuntamiento de San Sebastián. Goia también fue diputado de Infraestructuras Viarias y portavoz foral en la legislatura 2007-2011.