Con la investidura del próximo presidente del Gobierno español como principal incógnita para los próximos meses, y la opción de que el candidato socialista Pedro Sánchez repita en el cargo pendiente de la postura que adopten los partidos nacionalistas vascos y catalanes, el debate territorial y sobre el modelo de Estado vuelve al primer plano de la actualidad. Porque la distancia con el bloque de la derecha se ha acortado y la decepción con la actitud de Sánchez durante la legislatura pasada es grande, merced a sus reiterados incumplimientos en el caso de Euskadi.
El presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, ya advirtió de que es el propio presidente español en funciones el que debe acudir con una oferta definida, aparcando así la época de las peticiones a Moncloa. Ayer lunes en Mutriku, el portavoz parlamentario de la formación jeltzale y presidente del Gipuzko Buru Batzar, Joseba Egibar, marcó los márgenes de un debate sobre el modelo de Estado que deberá afrontarse en las próximas fechas, y que según él tendrá como base “el reconocimiento de la realidad nacional vasca y de la catalana” por parte del Estado.
Defendió que “el debate sobre el modelo territorial exige contemplar los ámbitos de decisión comunitaria de nuestras respectivas naciones”. “Para preservar lo que tenemos y dar un nuevo salto, los catalanes y los vascos debemos crear oportunidades nacionales”, añadió Egibar. Explicó que, en Euskadi, “seguiremos priorizando la construcción de la nación vasca y de la sociedad vasca, trabajando a favor de la justicia social, los valores comunitarios, del euskera, la economía y la industria, de empleos y sueldos dignos, del modelo educativo, las selecciones vascas, el derecho a decidir y el medio ambiente”.
“En favor, en definitiva, de todas las vascas y los vascos”, para que en el futuro “dependamos menos de España y seamos más libres”. “El camino es la defensa de Euskadi”, apostilló en un mitin con motivo del 128 aniversario de la fundación del PNV y al que asistieron representantes institucionales y cargos internos del partido como la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria; la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, y el presidente de las Juntas Generales en ese territorio, Xabier Ezeizabarrena.
Objetivo político
En su intervención, Joseba Egibar recordó que “la cuestión nacional vasca es lo que hace que se cree el PNV, el objetivo político es la constitución de un estado vasco que nos una”. “El principio democrático es la fórmula de legitimación del proyecto político de una nación como la vasca y, para eso, hace falta una voluntad política continuada”, defendió. Dijo que “esa es la clave de la estrategia del PNV” e insistió en que “la expresión de la voluntad popular tiene que encontrar” una vía para materializarse.
La ciudadanía vasca tiene que poder pronunciarse al respecto, señaló, ya que “la voluntad popular no debe quedar acotada por una norma que se presenta como inmutable”. Su decisión debe tener además “un valor relevante” y prevalecer en la relación con el Estado, que debería “modificar lo que fuera necesario después de una negociación, y dar cauce a la voluntad libre y democráticamente expresada”.
Advirtió, eso sí, de que “el Estado no te va a regalar nada, tú tienes que conquistarlo, tienes que reclamarlo y conseguirlo por vías políticas y democráticas”, ya que “estamos operando políticamente en un Estado que niega nuestros derechos nacionales”, dijo Egibar.
Manipular la historia
El presidente del GBB instó además a la izquierda abertzale a gestionar sus resultados electorales “con menos soberbia y más respeto”. Se dirigió a quienes hablan de “jóvenes locos y sensatos”, en alusión al mensaje difundido en redes sociales por el senador electo de EH Bildu Mario Zubiaga, que se refirió de ese modo a los primeros militantes de ETA. “Lo que demuestran es que son únicos manipulando la historia, que han nacido para ocultar tanto sufrimiento y eludir responsabilidades, y que esa reflexión se ha hecho desde la rabia”, aseveró Egibar, y concluyó que “no se puede faltar a la verdad”.