Construido en 1968, el pabellón de La Casilla en Bilbao tiene los días contados. Actualmente sólo acoge eventos puntuales como los bailables de nuestros mayores y durante la pandemia por ejemplo, fue centro de vacunación contra el covid.
Sus obsoletas instalaciones van a ser derribadas y ya vamos conociendo nuevos detalles. El Ayuntamiento de Bilbao va a ceder a una empresa por un período de 40 años y con un valor de 20 millones de euros, la construcción y explotación del nuevo polideportivo, que tendrá usos polivalentes, y de la plaza en la que se ubica.
Conciertos nocturnos, eventos deportivos, culturales...
La Casilla busca ser el nuevo revulsivo social y económico de esta zona. Su derribo de la Casilla dará paso a un nuevo polideportivo mucho más moderno, con piscina, espacios multiusos, y un parking subterráneo. Lo veremos inaugurado en 2026 y tendrá usos polivalentes para acoger eventos nocturnos como ya lo hizo en el pasado, conciertos, veladas de boxeo y otros eventos deportivos o culturales que dinamicen este entorno, que le devuelvan "la vida" que reclaman los comerciantes y hosteleros de la zona.
A finales de año se adjudicará el derribo
Para este verano, el ayuntamiento de Bilbao tendrá listos ya los pliegos del concurso de concesión, y previsiblemente a finales de este año, se adjudicará el proyecto, que conllevará dos años de obras para construir el nuevo pabellón y urbanizar la plaza. Y de forma paralela el ayuntamiento va a trabajar en la mejora de las calles del entorno con ampliaciones de espacios peatonales explica el alcalde Juan Mari Aburto: " abarcaremos mejoras en Errekalde, Ametzola y la parte baja de Irala. Los planes del ayuntamiento pasarán por la modernización de la calle Autonomía, la humanización de la calle Gordóniz, la recuperación comercial de Labayru y el impulso a la zona de Kirikiño y parte baja de Irala. En total, una población de más de 20.000 residentes".
Autonomía perderá 2 de los 5 carriles
En esta línea, el concejal de Planificación Urbana, Asier Abaunza, explica que hasta la llegada del cierre del anillo tranviario se va a calmar el tráfico ensanchando aceras y reduciendo carriles en el tramo de Autonomía donde aún no hay raíles, esto es, el más cercano a Zabalburu.
Los módulos de diferente naturaleza y tamaño, serán colocados alternativamente en las dos aceras a lo largo de toda la calle Autonomía, desde María Díaz de Haro hasta Zabalburu.
Más información detallada de este proyecto en www.bilbao.eus.