Actualizado hace 3 minutos
Estamos en Navidad y los artículos pirotécnicos son muy populares para acompañar las celebraciones. Pero, ¡cuidado! Un mal uso, su venta ilegal o su irregular almacenamiento y fabricación puede salir caro, porque las multas oscilan entre 300 por infracciones leves y 600.000 euros por las muy graves.
El control de la venta al por menor
La Guardia Civil tiene que comprobar si las tiendas superan en artículos los 150 kilos de explosivo (no está permitido más), así como sus medidas de seguridad (puerta de entrada y salida independientes), el número máximo de clientes (en este caso 16) y los sistemas de alarma y extinción de incendios.
Los agentes revisan si todos los productos cumplen con la normativa de catalogación, etiquetado en español, envasado, peso neto, fabricante o importador y edades mínimas para su uso, todo ello a la vista en la etiqueta.
No pueden adquirirlos personas bajo influencia de alcohol o drogas (tampoco venderlos), y está prohibida la venta ambulante de esos artículos pirotécnicos en los mercados navideños.
Recomendaciones de uso
Desde la Guardia Civil, se insta a hacer un uso responsable de estos artículos y se recuerda que nunca se use llama viva (un mechero, por ejemplo) para prenderlo (mejor mecha) y en el caso de los cohetes que no se cojan con la mano.
Recomendaciones que también recuerdan a los compradores los empleados de La Traca, como dice a EFE Conchi Íñiguez, responsable de este comercio.
Otros escenarios donde hay mucha demanda
Son las baterías de fuegos artificiales lo que más venden en estas fechas. Las fiestas de los pueblos en verano y los eventos deportivos, sobre todo de fútbol, son otros acontecimientos donde hay mayor demanda. Conchi y sus empleados mantienen la puerta de la tienda siempre cerrada, la abren con mando a distancia a los clientes y mantienen los artículos alejados de estos.