32 días. Es el tiempo que permanecerá en el diván, sin movimiento a la espera de resolución, la semifinal de Copa que intentará resolver el Athletic ante Osasuna el próximo 4 de abril en San Mamés. Será entonces, con La Catedral en ebullición, a pleno rendimiento, cuando los hombres de Ernesto Valverde traten de dar la vuelta al adverso 1-0 que proyectó el luminoso de El Sadar en la fría noche del miércoles. El gol marcado por el marroquí Abde Ezzalzouli en el minuto 47 obligará a los rojiblancos a sacar adelante un envite en el que la parroquia bilbaina volverá a ejercer como jugador número doce del equipo. A dicho factor ambiental, amén del futbolístico, se abrazan ya los leones para buscar argumentos que alimenten la esperanza de asomar en una nueva final del torneo del K.O.
El desafío, no obstante, deberá esperar, pues a un mes de la vuelta de la semifinal, al Athletic le urge poner el foco en LaLiga y recuperar sensaciones en los cuatro partidos del torneo de la regularidad que tiene por delante antes de intentar la remontada contra Osasuna. Noveno en la clasificación a dos puntos de la sexta plaza que defiende el Rayo Vallecano, rival este domingo en Vallecas, el conjunto rojiblanco debe cambiar de inmediato el chip y volver a sumar tras enlazar dos jornadas con derrotas. Los últimos tropiezos frente al Atlético en el Metropolitano (1-0) y contra el Girona en San Mamés (2-3) han hecho retroceder posiciones en la tabla a los de Valverde, que afrontarán dos partidos en casa y otros dos fuera antes de volver a hincar el diente a la semifinal copera.
De los cuatro compromisos en LaLiga hasta el 4 de abril, fecha irremediablemente marcada en rojo, el primero será contra un rival directo por Europa como el Rayo Vallecano a domicilio; el segundo ante el líder Barcelona en San Mamés y tanto el tercero como el cuarto frente a dos rivales de la parte baja de la tabla como Valladolid y Getafe. El envite contra el cuadro pucelano tendrá lugar en el Nuevo José Zorrilla el próximo viernes 17, mientras que la cita liguera ante el Getafe se disputará en San Mamés el sábado 1 de abril. Será tras dejar atrás un nuevo parón por los compromisos internacionales y solo tres días antes de la vuelta de la semifinal de Copa.
Para entonces, además de estar enganchado a las posiciones europeas, Valverde espera recuperar todas las piezas del puzle, pues los contratiempos por problemas físicos se multiplicaron en las horas previas a la visita copera a Iruñea. Además de la forzada ausencia del todavía renqueante Ander Herrera, fuera de combate en los cuatro últimos compromisos oficiales por culpa de una nueva lesión muscular, el técnico no pudo contar en El Sadar con el tocado Yeray Álvarez, Jon Morcillo, ni Unai Simón. Raúl García y Nico Williams, por otra parte, saltaron al verde en la segunda mitad del encuentro tras figurar entre algodones a causa de sendos esguinces de carácter leve en el hombro y en el ligamento lateral interno de la rodilla derecha, respectivamente.
Osasuna, mientras tanto, encaró el duelo del miércoles con la única baja por lesión del lateral Rubén Peña y en un óptimo estado de forma y de confianza. Hasta el 4 de abril, los rojillos, octavos en LaLiga con un punto más que el Athletic, se enfrentarán a Celta y Villarreal en El Sadar y visitarán a Valencia y Mallorca, rival al que se medirán a domicilio el viernes 31 de marzo, un día antes de que el Athletic reciba al Getafe en San Mamés.
Mensaje del vestuario
Tras perder 1-0 el miércoles en Iruñea, Dani García y Julen Agirrezabala desfilaron por zona mixta. “Hay que pasar la mala racha cuanto antes, pensar en el partido contra el Rayo y resetear ya”, proclamó el centrocampista rojiblanco, quien subrayó que “cuando van bien las cosas, todo es muy bonito y todos estamos muy arriba, pero en estos momentos es cuando hay que ver al verdadero jugador porque jugamos con la ilusión de mucha gente y hay que darle la vuelta lo antes posible”.
Respecto a la Copa, Dani García destacó que “queríamos ir con ventaja al partido de casa, pero no ha podido ser y hay que mirarlo positivamente. Tenemos un gran reto por delante, San Mamés estará a reventar y seguro que la afición nos lleva en volandas en la vuelta”. Agirrezabala, que llegó a tocar el balón en el gol de Abde, apuntó que “solo tenemos un gol de desventaja, San Mamés va a apretar y nos dará ese apoyo extra que necesitamos”. “Este domingo tenemos un partido importante también y queremos sumar los tres puntos para encontrar de nuevo esas buenas sensaciones y pelear por los puestos europeos, que también es un objetivo claro que tenemos en mente”, definió el guardameta donostiarra.