Cordal del Kamaraka. Trincheras y fortificaciones del cinturón de hierro

Una ruta para además de conocer cimas espectaculares, empaparnos de la historia que ellas desprenden. En este caso en dicho cordal se sitúa parte de las construcciones en forma de trincheras y puestos de cañón del cinturón de hierro de Bilbao.

DATOS PRINCIPALES

• Kilómetros: 13,49 km
• Desnivel positivo: 721+
• Duración: corriendo 2:30h / Caminar - correr: 2:55h / Senderismo 3:30h

DESCRIPCIÓN 

El Cinturón de Hierro que rodea Bilbao para evitar el avance y la llegada a la capital vizcaína de las tropas franquistas durante la Guerra Civil, como su nombre bien indica consta de trincheras y varios nidos de ametralladoras restaurados de aquella época. En esta ocasión vamos a poder ver y recorrer el tramo que pasa por el cordal del Kamaraka, frontera natural de Bizkaia con Araba.

Durante toda la ruta tenemos indicaciones claras Gonzalo Pérez Zunzunegui

Partimos de la estación de tren de Llodio y tan solo atravesando un par de carreteras llegamos a una calle la cual tras seguirla unos metros nos lleva al tramo de asfalto que sube al Santuario del Yermo. Abandonamos la misma en una curva y ahora transcurriremos junto a los prados de Sorginlarren antes de girar a la izquierda y empezar a remontar el curso del pequeño rio.

Más adelante tomaremos a la izquierda para seguir ascendiendo por pista ancha hasta un cruce siguiendo la senda de Errekabieta, dirección Yermo/Ganekogorta siguiendo el curso de un pequeño rio. Pasamos un puente de madera con el que salvamos el arroyo y llegamos a un punto donde parece que termina el camino, pero no es así.

La subida por el bosque es simplemente espectacular Gonzalo Pérez Zunzunegui

Justo en el punto donde un panel informativo nos explica viejas historias y fabulas sobre la Bruja de Lezeaga y algunas Lamias, un tramo acondicionado de escaleras de madera y cuerdas que harán más fácil remontar el duro repecho a través del espeso bosque, tras el cual continuaremos ganando metros al barranco hasta acercaremos a un mirador que se asoma al vacío del selvático barranco lleno de frondosa vegetación.

El Santuario del Yermo (Santa Marina) Gonzalo Pérez Zunzunegui

Seguimos alternando tramos abiertos con otros cerrados, pistas anchas con senderos angostos, pintado todo por un paisaje con robustos árboles, el verde de la vegetación y el arrullo del agua que va durante todo el trayecto unos metros más abajo. Todo ello se hace más entretenido aun porque está repleto de pasarelas, escaleras, cuerdas, pequeños puentes de madera.

Poco más adelante nos toparemos con el calero de Mintegieta, un horno donde antiguamente se cocía la roca caliza para obtener cal. Aquí junto a la puerta del calero tomamos unas escaleras que suben y tras pasar junto a la vieja chimenea de este enlaza con otra senda donde girando a la izquierda atravesamos la barriada de Isusi por su parte alta. De ahí por asfalto pasaremos junto a la Ermita de Santa Apolonia primero, y más tarde al Santuario de Santa María del Yermo, un bello conjunto artístico. En este punto tenemos una fuente donde reponer agua. Santa Lucia como también es conocida aún encierra civilizaciones pasadas con muchas historias escondidas. Se trata de una enigmática construcción cuyos cimientos aún siguen arrojando turbios secretos, como cuando una pequeña excavación de 2015 descubrió una pequeña necrópolis con dos tumbas junto a la puerta vieja del templo. Incluso se ha llegado a especular que fue fundado por templarios. También a los pies del Santuario existe un bar donde si el tiempo y el horario nos lo permite poder tomar algo más que agua.

Llegados al cordal Ganeko nos recibe lleno de nubes Gonzalo Pérez Zunzunegui

Desde este punto la senda sigue de forma más pronunciada por praderas verdes entre el karst, hay que tener cuidado ya que la senda se difumina a ratos, pero siguiendo los diferentes postes que indican que nos vamos adentrando en el Cinturón de Hierro iremos ganando cada vez más altura hasta llegar a un panel informativo de rutas del Cinturón de Hierro, punto donde también la panorámica que tendremos será digna de una pequeña parada, con vista a la cima de Gallarraga.

Cresteando por el cordal Gonzalo Pérez Zunzunegui

El Cinturón de Hierro consta de trincheras y varios nidos de ametralladoras restaurados y desde el mismo panel tomando la pista ancha ya vemos unos de los nidos de ametralladoras, el cual por medio de un acceso en la valla podremos visitar. Seguiremos a la par de las trincheras para alcanzar un camino más ancho, a través de este y poco más adelante saldremos de el por la izquierda por unas escaleras de madera y cuerdas. Aquí tenemos dos opciones, o bien seguir las trincheras por un sendero paralelo que nos llevara hasta un nuevo nido de ametralladoras. Seguir por ellas, alcanzar el ultimo nido y desde ahí de forma directa al estar bajo la cima del Kamaraka afrontar la subida directa, o bien la segunda opción que parte del primer nido y por la izquierda por una cómoda pista presenta una subida más suave a la cima

Nos dirigimos al Kamaraka Gonzalo Pérez Zunzunegui

Desde la cima de Kamaraka (797m) obtendremos las primeras vistas al Pagasarri y Ganekogorta, así como de Arrankudiaga, las cimas de Upo y Artanda, e incluso en día claro de la zona del Ganguren. Llega la parte más aérea del recorrido ya que desde este punto continuaremos por una preciosa senda a través del bello cordal, perdiendo altura primero hasta la vecina cima de Mugarriluze (735m), para luego descender por las faldas de su cara Este hasta una zona más cómoda. Tras pasar una zona más técnica con algo de roca culminamos en la última cima, tras una pequeña rampa, Goikogane (702m).

En la cruz de Goikogane Gonzalo Pérez Zunzunegui

Aquí en esta cima las vistas son todavía más impresionantes aun si cabe que antes ya que se abre el valle y deja panorámicas a los montes de Untzueta, Orozko y el macizo de Itxina ya en el Parque Natural de Gorbea. Existe una segunda cima coronada por una Ikurriña donde también nos podemos acercar.

Impresionantes vistas desde la Ikurriña de Goikogane Gonzalo Pérez Zunzunegui

Desde esta punta comenzaremos a perder altura más bruscamente a través de prados hasta enlazar con un camino más ancho, ya con el cordal a nuestras espaldas. Al llegar a la clara pista salen varios caminos. A la derecha una pista nos llevaría de nuevo al calero. A la izquierda tenemos acceso, si quisiéramos alargar la ruta a las cimas de Otsoerreta y Alpitxu, sencillas de llegar. En este caso enfilamos la larga bajada por la pista que nos sale enfrente y que nos lleva cómodamente durante unos tres kilómetros a Llodio nuevamente.

Vamos bajando hacia Llodio Gonzalo Pérez Zunzunegui

Una ruta sencilla y sorprendente donde descubrir bellos rincones como el barranco de Iñarrondo, la zona del Santuario del Yermo, parte del Cinturón de Hierro de Bilbao, y además disfrutaremos de impresionantes vistas desde el espectacular cordal de Kamaraka a Goikogane. Sin duda todo un regalo a nuestros sentidos en general, aunamos naturaleza con historia en esta ruta por la frontera de Bizkaia y Araba.