Vida y estilo

El curioso método de un profesor para cazar a sus alumnos copiando

En todas las clases siempre hay alguien que hace trampas para aprobar el examen
Un joven realiza un examen.
Un joven realiza un examen.

El verano ha llegado, y con ello, la finalización de la época de exámenes. De cara a esas semanas llenas de nervios y extensas rutinas de estudio, los alumnos de institutos y universidades, entre otros centros, llenan las bibliotecas con el objetivo de prepararse al máximo y obtener las mejores calificaciones en estas pruebas.

Respecto a los alumnos, no todos afrontan de la misma forma estas pruebas tan importantes que probablemente decidan su futuro. Así, pueden dividirse en tres perfiles. En primer lugar, están aquellos que buscan sacar la mejor nota posible, los que a lo largo de los años han sido calificados despectivamente como 'empollones'. Éstos, por lo general, no se conforman con simplemente aprobar la prueba, si no superarla con creces buscando la perfección.

En segundo lugar están todos aquellos alumnos que simplemente buscan aprobar el examen. Para ellos, un cinco o un siete es lo mismo. Lo único que buscan es no tener que recuperar las asignaturas ya sea en julio o en septiembre.

Y finalmente, están los tramposos. Al contrario que los dos grupos de alumnos previamente mencionados, éstos no se preparan los exámenes, si no que en vez de estudiar la materia aprendida a lo largo del curso, utilizan diferentes vías ilegales para buscar el aprobado.

Para hacer frente a esta situación, los profesores han de estar siempre alerta. Ya sea dando vueltas alrededor de la clase para vigilar de cerca a los alumnos, o de cualquier otra forma.

En redes sociales se ha viralizado un método ingenioso realizado por un profesor que ha dado la vuelta a mundo y ha dejado en evidencia a todos sus alumnos

El método de la luz

A día de hoy, todo el mundo cuenta con un teléfono móvil. Cada vez a una edad más temprana, incluso los más pequeños de la casa cuenta con una pantalla con la que entretenerse, por lo que la habilidad con la que manejarse en estos dispositivos también aumenta.

Así, estos dispositivos también han llegado a las aulas, e incluso a momentos cruciales para todo alumno como lo son los exámenes. Ya sea escondido en el estuche, debajo de la mesa o colocado sobre la pierna, los teléfonos móviles se han convertido en uno de los métodos más comunes para hacer trampas durante las pruebas.

 
 
 
 
 
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Para hacer frente a este problema, un profesor ha decidido realizar el denominado 'método de la luz'. Durante el examen, dicho profesor se levanta de su escritorio y, sin avisar a sus alumnos apaga todas las luces del aula. En ese momento es cuando surgen los resultados del método y la gran mayoría de los alumnos son cazados 'in fraganti'.

En ese mismo instante, no todas las luces se apagan, si no que se iluminan gran parte de los rostros de los alumnos. Esto se debe a que muchos de ellos han escondido en diferentes lugares sus teléfonos móviles para hacer trampas en el examen.

Ante el inesperado gesto del profesor, los alumnos se sorprenden por completo y levantan sus cabezas de los teléfonos móviles, ya que se han dado cuenta del error que han cometido y de que probablemente no vayan a aprobar el examen.

La moraleja detrás de todo esto es que es importante prepararse bien para los exámenes y no caer en la tentación de hacer trampas, ya sea a través del uso del teléfono móvil o cualquier otro método.

2024-07-10T08:56:45+02:00
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