Entre todos los grupos junteros han conseguido dar forma a un paquete de ayudas para dar una cobertura especial al sector del transporte, especialmente perjudicado por el alza de los precios de los combustibles, y pieza fundamental para la vida y actividad de Bizkaia, tal y como se comprobó en los peores momentos de la pandemia. Lo aprobado hoy, a pocos días de la entrada en funcionamiento de los primeros arcos de peaje para vehículos pesados en Bizkaia es un punto más de agarre para miles de profesionales, autónomos y pequeñas empresas que a diario sacan sus vehículos a la carretera.
En concreto, el paquete de ayudas acordado por Elkarrekin Bizkaia, EH Bildu, PSE y PNV -al que se ha sumado el PP, aunque calificando de “tirita” estas medidas- garantiza que durante todo 2023 se mantendrá “la ampliación del forfait al 70%” para la compensación de gastos con el que microempresas y autónomos pueden reducir su base imponible en el Impuesto de Sociedades o en el IRPF. Y no menos importante con la mirada puesta ya en 2024: el compromiso para estudiar “y en su caso aplicar con carácter permanente esta misma medida”.
Además, se solicita formalmente que también se establezcan bonificaciones por frecuencia de uso para los vehículos pesados de las categorías I y II que cumplan con la normativa europea. Y, al mismo tiempo, se insta a la Diputación Foral a marcar una tabla de descuentos en función de la motorización y las emisiones del vehículo con el objetivo de que aquellos que menos contaminen tengan una tarifa más favorable.
Asimismo, se ha acordado crear un foro municipal de coordinación con los ayuntamiento ubicados en los tramos sujetos a ese peaje con el propósito de facilitar el intercambio de datos y opiniones entre instituciones.