La presidenta de Confebask, Tamara Yagüe, hizo hoy una defensa de la contribución de las empresas al Estado de Bienestar en Euskadi, al tiempo que reclamó una fiscalidad "más incentivadora" para "acompañar" al tejido empresarial en un nuevo tiempo en el que la economía vasca va a estar directamente influida por la "encrucijada" en la que se encuentra Europa.
La líder de los empresarios vascos participó hoy en Bilbao en una conferencia organizada por Nueva Economía Fórum, y en la que el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ejerció como introductor. Garamendi señaló la imagen "seria y responsable" que se tiene del empresariado vasco en el Estado y en Europa y la "lealtad institucional" que profesa Confebask en el mundo de las organizaciones empresariales.
Yagüe se pronunció sobre la demanda que han presentado los sindicatos ELA y LAB para forzar a Confebask a negociar un SMI vasco propio, algo a lo que la patronal se opone. "Nos defenderemos en los tribunales", anunció Yagüe, que señaló también que la patronal vasca "ha pasado página" ya de este tema porque "estamos con asuntos más urgentes".
"No estamos legitimados para negociar un SMI propio. Estamos dispuestos a acordar un SMI mínimo de convenio, pero dentro de la Mesa de Diálogo Social", en una negociación que incluya también otros aspectos, como "la mejora de la productividad y la competitividad y la reducción del absentismo".
"Me cuesta creer que el salario mínimo sea el caballo de batalla cuando tenemos los mejores parámetros en salarios y horas trabajadas", apuntó la dirigente de Confebask. Sobre el absentismo, expresó que primeramente constituye un problema de salud que afecta a los trabajadores, y que debe ponerse el foco ahí, aunque añadió que tiene un impacto en los costes empresariales. Asimismo, Yagüe remarcó que la solución al problema del absentismo debe alcanzar "entre todas las partes" implicadas -empresas, instituciones y trabajadores- mediante "el compromiso, la colaboración y la confianza".
Por otra parte, la presidenta de Confebask, elogió el actual modelo de colaboración público-privada que marca la relación entre instituciones y empresas, y señaló que los planes industriales de la Unión Europea "pueden suponer una oportunidad" para la industria vasca "si somos capaces de aprovecharla". "El bienestar de hoy no está garantizado en el futuro. Hay que trabajarlo. Rentabilidades pasadas no aseguran rentabilidades futuras", añadió.
En este sentido, aseguró que las empresas vascas quieren seguir contribuyendo al progreso económico y social del país, pero la sociedad las debe "acompañar" porque "no hay estado de bienestar sin empresas competitivas"
Yagüe ha reclamado un mayor "reconocimiento social a la empresa" y ha defendido "prestigiar su labor". Según ha indicado, hay que consolidar la base industrial "con nuevas vocaciones empresariales" que están de "capa caída" y, por ello, ha incidido en que hay que poner en valor la aportación de la empresa y el empresariado vasco.
En este sentido, abogó por una "fiscalidad más incentivadora" y ve "imprescindible incentivar el crecimiento de la economía utilizando todas las posibilidades que ofrece el Concierto económico". "Y sin duda todavía queda recorrido", ha apuntado Yagüe que ha destacado que afortunadamente la interlocución con las instituciones es "buena y franca" y siguen trabajando "en ello, en común".
Yagüe ha recordado que presentaron una bateria de medidas fiscales que consideraban "idóneas" para aumentar el crecimiento económico y regional y ha subrayado que no se trata de "recaudar menos sino recaudar mejor" utilizando el Concierto Económico. A su juicio, hay que trabajar en la fiscalidad de las empresas y en quitar el tope de las deducciones fiscales de las bases imponibles. "Confiamos en que poco a poco podamos trabajar para incentivar ese crecimiento económico", ha añadido.