Las últimas previsiones del Gobierno vasco publicadas este viernes confirman el avance del PIB en el 2,2 % para 2025 y el 1,9 % para 2026, las mismas cifras que ya se avanzaron en las anteriores previsiones de septiembre.
Las nuevas previsiones del Gobierno vasco, que hoy ha hecho públicas el vicelehendakari y consejero de Economía, Mikel Torres, confirman que la economía vasca va a seguir creciendo de forma sólida el año que viene y se van a crear 14.000 empleos en 2025 y otros 11.000 en 2026.
Con ello, la tasa de paro bajará al 6,6 % este año y seguirá descendiendo al 6,4 % en 2026, con la perspectiva de aproximarse al 6 % en 2027.
El vicelehendakari ha subrayado que los últimos datos ponen de manifiesto un crecimiento "sólido y estable, que estamos manteniendo a lo largo de todo el año, incluso en un contexto internacional de incertidumbre".
Sobre esta base positiva, las previsiones para el periodo 2025-2027 apuntan a una senda de crecimiento "estable y equilibrada".
Dichas previsiones se han elaborado bajo el supuesto de una progresiva normalización de los tipos de interés, con un Euribor en torno al 2 % en 2026-2027, estabilidad del euro frente al dólar y un entorno internacional de crecimiento moderado, sin nuevos shocks energéticos.
No obstante, se mantienen riesgos asociados a la política comercial, la estabilidad financiera y la situación geopolítica.
En concreto, Euskadi en 2025 crecerá un 2,2 % y en 2026 un 1,9 %, impulsado por la fortaleza de la demanda interna, el consumo y la inversión, lo que aportará 2,8 puntos porcentuales al crecimiento en 2025 y 2,3 puntos en 2026.
El consumo de los hogares mantendrá un tono expansivo, con un crecimiento del 2,7 % en 2025, respaldado por la mejora del empleo y la moderación de la inflación, aunque se prevé una desaceleración gradual hasta el 2,1 % en 2026.
La inversión continuará siendo el componente más dinámico de la demanda, con incrementos del 3,8 % en 2025 y del 3,1 % en 2026.
En cambio, el sector exterior -las exportaciones-, seguirá restando crecimiento debido a la debilidad del comercio internacional y al impacto de los aranceles estadounidenses.
La industria inicia una recuperación
Por sectores, los servicios y la construcción continúan liderando el crecimiento, mientras la industria inicia una recuperación gradual.
La construcción se consolidará como el ámbito más dinámico de la oferta, con crecimientos previstos del 3,6 % en 2025 y del 2,7 % en 2026, impulsados por la ejecución de infraestructuras y la demanda residencial.
Los servicios seguirán siendo el principal motor del crecimiento económico, con avances del 2,8 % en 2025 y del 2,2 % en 2026, gracias al consumo interno y a la actividad turística.
La industria mantendrá un ritmo de crecimiento más contenido, con un 0,3 % en 2025 y un 1,0 % en 2026, condicionada por la incertidumbre internacional, aunque con expectativas de una recuperación gradual a partir de 2026. El sector primario continuará mostrando volatilidad, con una caída prevista (-0,6 %) en 2025 y una ligera recuperación (0,4 %) en 2026.