Reserva un piso en Airbnb y se encuentra con esta increíble sorpresa tras una puerta secreta

Alquilar un piso en Airbnb es algo que hacen millones de personas, que prefieren alojarse en una casa por unos días en lugar de recurrir a un hotel cuando viajan a una ciudad para hacer turismo, para ir a un concierto, por trabajo, por temas médicos, etcétera. Normalmente en el anuncio queda muy claro lo que se van a encontrar, también con fotos, pero a veces al llegar uno se topa con una enorme sorpresa.

23 millones de visualizaciones

Pero cualquier sorpresa es una anécdota comparada con la que vivió un joven, que grabó toda la experiencia en un vídeo que ha subido a TikTok la cuenta @mysteryhappened y que lleva más de 23 millones de visualizaciones y de 15.000 comentarios. “Nunca volveré a reservar en Airbnb”, aparece rotulado, con unos cuantos emojis de carcajadas.

En la grabación se ve cómo mientras el hombre debe de estar tranquilamente en el sofá del salón se abre lo que parecía una estantería y resulta ser una puerta secreta, tras la que aparece un señor mayor. “¿Perdón?”, dice el inquilino impactado ante lo que está viendo. “Vosotros sois las personas a las que he alquilado la casa, ¿no? ¿Habéis estado aquí todo el día?”, responde él. “Sí. ¿Quién eres tú?”, pregunta el joven, que no entiende nada. “Soy el propietario del piso, soy Richard”, contesta él, provocando un ataque de risa del alquilado.

Sin ropa para ir a la ducha

“¿Qué estás haciendo? ¿Dónde están tus pantalones?”, le pregunta, al ver al propietario a medio vestir. “Estaba pensando en darme una ducha. Si no es inconveniente me gustaría usar el baño”, dice, desconcertando aún más al joven, que le responde: “Perdone, le hemos alquilado esta casa”.

La conversación sigue y el inquilino le hace la pregunta clave: “¿Qué estás haciendo aquí?”. Y la respuesta aún es más inquietante. “Yo vivo aquí”. Obviamente el joven lo cuestiona. “¿Dónde está mi privacidad?”. Pero el señor trata de argumentar que no molesta a nadie. “Si recuerdas bien, yo dije que era una casa de tres habitaciones, dos cuartos de estar, cocina y baño. Es lo que tenéis, lo que habéis alquilado. Yo me encierro aquí, no voy a estar alrededor de vosotros”, explica señalando al espacio del que está saliendo.

Se cuela por la noche

Pero después de decirles que no les va a importunar, le suelta lo siguiente. “Deberíais haberos dado cuenta de que he sacado mis platos y usado la cocina”. “¿O sea que has estado en la cocina mientras dormíamos?”, le plantea el joven. “Sí, tenía que llevar mis platos sucios”, afirma con naturalidad, y también le dice que tiene su ropa “en la lavadora. Espero que no os importe”.

“¿Qué está pasando aquí?”, vuelve a preguntar el inquilino, incapaz de asumir la situación. Y el propietario le asegura que todo ha sido “mala suerte”, porque pensaba que todos se habían ido. “Estaba escuchando con la oreja puesta en la pared para ver si había alguien en la casa. Hago todo esto por la noche. Podríais haber notado después de medianoche unos crujidos en las escaleras, porque era yo usando el retrete”.

Su "pequeña mazmorra"

El dueño sigue defendiéndose recalcando que los alquilados tienen “el uso de la casa” mientras él se queda en su “pequeña mazmorra”. Pero para rematar le dice que “es posible que tenga algunos invitados de vez en cuando, pero no les he dicho que he alquilado la casa en Airbnb. Así que si ellos quieren saber dónde estoy, ¿les podríais pasar aquí golpeando en la puerta?”.

Por si eso fuera poco, justo antes de que el vídeo llegue al final, el señor le dice al joven que la noche anterior, cuando fue al retrete, escuchó cómo su mujer roncaba bastante.