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Profundizando en la agresividad canina con David Nieto Maceín

El experto sitúa el miedo y la desconfianza del perro como causa de muchas respuestas agresivas y nos ayuda a desterrar algunos mitos en torno a estos comportamientos
Profundizando en la agresividad canina con David Nieto Maceín
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26:02

Con varias décadas de experiencia, el etólogo y adiestrador canino David Nieto Maceín es una de las voces más respetadas en el ámbito del comportamiento animal. Especialista en agresividad canina, Maceín desmonta mitos y reivindica el diagnóstico como punto de partida indispensable para cualquier intervención.

"La agresión no es un problema simple. Es un síntoma con muchas causas posibles, y sin un diagnóstico correcto se puede agravar lo que intentamos resolver", afirma con contundencia.

Agresión en Casa: Tipos y Errores Comunes

Aunque la agresión hacia los miembros de la familia no es la más frecuente, sí ocurre. Maceín identifica distintos patrones: posesiva, irritativa, competitiva y jerárquica. Según explica, el mayor error es confundirlas.
"No es lo mismo una agresión por miedo que una jerárquica o posesiva. Si se interviene mal, el problema empeora."

David Nieto Macein, etólogo y adiestrador canino

En algunos casos, la conducta agresiva puede esconder una causa orgánica o patológica, sobre todo si el perro muestra comportamientos contradictorios, como buscar contacto para luego agredir.

El Miedo, la Raíz Invisible

Gran parte de las agresiones, sostiene, tienen su origen en el miedo. "Si un perro evita el contacto, normalmente desconfía o tiene miedo. Si se invade su espacio, puede defenderse."

En casos extremos, puede llegar a una agresión crítica, cuando el perro siente que su vida está en riesgo. El problema, advierte, es que "si el perro aprende que agredir funciona para alejar la amenaza, anticipará la respuesta y se volverá más agresivo con el tiempo".

Reactividad no es Agresividad

Maceín critica el uso generalizado del término "perro reactivo":
"Se usa para evitar decir 'agresivo', equivale a agresión. Mi propia perra es muy reactiva, pero no es agresiva. La diferencia está en el autocontrol."

Prevención, castración y límites

La prevención, insiste, comienza desde cachorro. "Si se observa una mínima agresividad y no se actúa, se refuerza." Sobre la castración, Maceín advierte que no es una solución universal:

  • "En agresiones jerárquicas puede ayudar. En las posesivas, no sirve. En las de miedo, es contraproducente."

Aunque trabaja en terapia conductual, es realista: "No todos los perros son rehabilitables. Podemos mejorar el control, pero el riesgo latente puede permanecer."

Evaluar Conducta, no Raza

Sobre la reforma de la ley de Perros Potencialmente Peligrosos (PPP), Maceín está a favor de evaluar individualmente la conducta, pero se muestra con alguas inquietudes sobre una normativa que aún no ha cristalizado: "Lo lógico es valorar al perro por su comportamiento, no por su raza. El problema es quién va a hacerlo y con qué formación."

19/10/2025
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