La abstención del PSOE que propició que decayera en el Senado una iniciativa para impulsar la oficialidad de las lenguas cooficiales (euskera, catalán y gallego) en la Unión Europea (UE) no ha sentado nada bien en las filas del PNV. El presidente del EBB, Andoni Ortuzar, achacó el posicionamiento de los socialistas a que internamente “ha podido más el alma jacobina”, aunque también censuró el comportamiento desde las filas del PP, que rechazó esta propuesta que partía de Junts, ya que “resulta extraño que Feijóo no quiera que su lengua sea utilizada en las instituciones europeas”. Así se pronunció el líder jeltzale en el encuentro celebrado ayer en la sede de la Fundación Sabino Arana, donde se reflexionó acerca de La contribución internacional de Euskadi a la Agenda 2030, dentro del proceso de escucha activa Entzunez Eraiki puesto en marcha por la formación nacionalista. “Es muy llamativo que el PSOE optara por la abstención cuando era lo mismo que un no. Él sabía que, con las fuerzas que había en el no, la abstención suponía echar abajo esa alternativa”, puntualizó Ortuzar.
A su entender, los socialistas “han metido la pata” en este asunto porque, una vez más, se ha impuesto el alma “centralista” del partido, que “siempre se impone en los momentos críticos, a pesar de que tiene una estructura federal, y de que en Euskadi, Catalunya y en Valencia, haya gente que acepta la plurilingüismo”. “Pero, al final, cuando tienen que votar, votan siempre por el monolingüismo”, lamentó Ortuzar. Su reproche se expandió asimismo hacia las filas conservadoras, “y más siendo Feijóo senador y proviniendo de una nacionalidad y una zona que tiene lengua propia” como Galicia. “Es algo que no casa bien con la imagen que él ha proyectado de persona de la periferia y que entiende la coexistencia de lenguas diferentes”, argumentó el dirigente jeltzale.
Agenda 2030
Centrándose ya en el encuentro de ayer, Ortuzar reafirmó la apuesta “firme, sincera y total” del PNV por “enfilar el camino” de la Agenda 2030, que puede permitir a Euskadi colocarse como un pueblo “referente” en el ámbito internacional y europeo. “Estamos involucrados hasta las cachas y no es márketing”, dijo. “No se trata de ir a la moda, sino que el objetivo es integrarla y que esté dentro de la política del partido, en los batzokis”, y no se limite a “llevar en la solapa” la insignia del “circulito de colores”, manifestó.
Ortuzar afirmó estar “convencido” de esta vía en tanto que “esto es algo más que una tarea de las instituciones” porque hay que “contagiar y transmitir a toda la sociedad que es una tarea grupal, coral, de pueblo”. “Somos un pueblo pequeño y, si lo cumple solo Euskadi, no arreglaremos el mundo, pero si todos hicieran como nosotros y tuvieran esa ambición que planteamos, las cosas serían más sencillas. Al final, es encadenar eslabones en una cadena que quiere construir ese mundo sostenible, mejor y perdurable”, enjuició Ortuzar. El PNV entiende que se dan las condiciones para que Euskadi pueda ser un referente en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y de esta Agenda 2030. Con este espíritu se encuentra escuchando a los expertos, consciente de que esta evolución puede “generar contradicciones” y daños “colaterales o perversos”, por lo que es necesario “hacerlo bien”. De esta forma, precisó que hay que “ayudar a bien morir” a los sectores que afecte este proceso y buscarles alternativas.
Paralelamente, el director del Máster en Relaciones Internacionales y Diplomacia Empresarial en la Universidad de Deusto, Iñigo Albiol, defendió que avanzar en la Agenda 2030 va a permitir a Euskadi, “un pueblo pequeño, escalar en su nicho”. “Tenemos que ser campeones de nuestro nicho: un modelo de desarrollo sostenible”, corroboró. Además de ellos, el acto contó con la participación de la presidenta de Sabino Arana Fundazioa y secretaria del EBB, Mireia Zarate, así como del responsable de Innovación Política del PNV, Xabier Barandiaran, en presencia del alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto.