¿Es obligatorio estar feliz y sonriente en Navidad? Lo hemos consultado con uno de nuestros psicólogos de cabecera, Luis de la Herrán que en una entrevista en ONDA VASCA ha analizado cómo el contexto social y verbal condiciona nuestro bienestar emocional durante las fiestas.
Según el experto, existe una imposición de alegría que resulta psicológicamente imposible de cumplir a voluntad, ya que "nadie elige las emociones que experimenta". Por ello, propone aspirar a sentirse "equilibradamente feliz" en lugar de forzar una sonrisa.
Propósitos que funcionen
Para que los objetivos de año nuevo sean útiles, De la Herrán sugiere que sean concretos, evaluables y, sobre todo, personales. Advierte que no es necesario empezar el día 1 y que debemos ser benevolentes con los errores: "Tenemos que darnos permiso para las caídas". El progreso no es lineal, sino que funciona como una "línea de dientes de sierra" con avances y retrocesos.
Preguntado por las reuniones familiares, considera que la clave reside en ajustar las expectativas sobre los demás, aceptando que "esto es lo que hay". Asimismo, el psicólogo recalca que quienes atraviesan un duelo no deben sentirse obligados a participar: "No hay que hacer lo que los otros esperan". Al final, la flexibilidad mental es el factor que mejor correlaciona con la salud mental.