El escritor y periodista madrileño Alfonso Ussía ha fallecido en Madrid a los 77 años. Ussía comenzó su carrera literaria escribiendo poesía satírica y pronto se convirtió en columnista en periódicos y revistas de carácter conservador, como ABC, Diario 16, La Razón, Época, El cocodrilo y El Debate. Ussía utilizó sus columnas para mostrar su ultranacionalismo español y en muchas ocasiones confrontar con Euskal Herria.
El autor madrileño, cercano a la ultraderecha, fue un provocador nato y recurrió al insulto sin ningún pudor. Corinna Larsen, amante del rey Juan Carlos I, le demando por llamarla "insuperable golfa", "zorrón desorejado", "recauchutada" o "profesional del sexo" en uno de sus artículos. Sin embargo, una jueza le absolvió por considerar que esos comentarios "injuriosos" y "vejatorios" no suponían un delito de injurias graves.
En cambio, sí fue condenado por un delito contra el honor del también fallecido Fernando Delgado. En una de sus columnas en La Razón, Ussía llamó a Delgado "miserable", "mierda" e "hijoputa" por unas palabras que el periodista nunca pronunció sobre Alfredo Urdaci, Federico Jiménez Losantos y el propio Ussía, a los que supuestamente llamó "herederos de los asesinos de Lorca".
"Hijos de puta"
El nacionalismo vasco y catalán fue uno sus principales campos de batalla. Llegó a sugerir que fuera el Ejército español el que se encargara de resolver los supuestos conflictos con el independentismo vasco y catalán.
También cargo contra la cultura vasca. En una de sus columnas más polémicas -bajo el título "Hijos de puta"- acusó a las bandas "Sociedad Alcohólica" y Su Ta Gar de hacer apología del terrorismo. Precisamente, en 2006, la banda gasteiztarra fue absuelta por la Audiencia Nacional de enaltecimiento del terrorismo por considerar que las letras de sus canciones no menospreciaban a las víctimas.
No tuvo, sin embargo, reparos en alabar las 'bondades' del régimen franquista y desmentir que Franco persiguiera el euskera. "Es rotundamente falso que se persiguieran los idiomas provinciales, hoy autonómicos. En las provincias vascas, las sociedades rurales, pescadoras y marineras, y en muchas localidades del interior se hablaban con plena libertad los dialectos vascos", escribió.